REAL MADRID 1 - JUVENTUS 1
El incansable Vidal: Fue el que más corrió en el Bernabéu
No se cansa, no abandona y jamás desiste. El chileno volvió a ser una de las figuras de Juventus en su encuentro 50 por copas europeas.
El partido 50 de Arturo Vidal en competencias UEFA tuvo todo para ser inolvidable. El Bernabeú como escenario, una semifinal de Champions League y el resultado: Juventus clasificando a la final después de casi con una década con el chileno como figura, dejando en el camino al campeón vigente.
Es evidente que algo cambia en Vidal cuando el escenario lo amerita. No es lo mismo jugar contra el Cesena que contra el Madrid. Los estadios llenos, los flashes, la presión, parecen ser lo que el chileno necesita para encontrar su mejor nivel. De la lesión, los problemas en la rodilla y las dudas, ni rastros. La semifinal fue la muestra.
Tal como en la ida, el nacional volvió a ser el equilibrio y el inagotable en la mitad de la cancha de Juventus. Menos libre que Turín, ésta vez le tocó pegarse a Pirlo cerca de los centrales, para correr por todos cuando el Madrid amenazaba con llevarse al rival por delante. Vidal sobrevivió. Fue el faro del mal momento y no perdió la precisión, cuando encontrar un azul en la cancha del Bernabeú era casi una útopia.
Había esfuerzo en el gesto, pero también inteligencia. Esa que te da entender casi todos los puestos del campo. Literalmente. Porque en Madrid, Vidal pasó de centrocampista en el primer tiempo, a interior, para terminar como segundo atacante cuando el empate no llegaba.
Pero llegó, y ahí nuevamente el retroceso, la intensidad y el esfuerzo pasó por sus pies. Porque Vidal pese a todo nunca deja de actuar como un jugador normal, de equipo, que comprendió hace largo tiempo que los éxitos no se logran solo. Por eso es lo que es. Por eso está donde está.