Alexis sigue en racha, pero Arsenal se hunde en Champions
El chileno anotó otra vez y fue figura, pero su equipo volvió a defraudar. Una derrota ante Olympiakos que lo deja último en su grupo y sin puntos tras dos partidos
El Arsenal sigue sin despertar de su pesadilla europea. Este martes repitió los errores cometidos ante Dinamo Zagreb en el debut y cayó por 3-2 ante Olympiakos, en otra actuación llena grises, en la que ni siquiera la nueva conquista de Alexis Sánchez sirve al final. El chileno sumó su cuarto gol en pocos días, que no alcanzó para remecer un cuadro que se complica ante todos.
Da igual si al frente está el mejor equipo del mundo o uno mediocre. Este Arsenal siempre se las arregla para sufrir más de la cuenta. Este martes en Londres no fue diferente. Comenzó dominando, se creó opciones en los primeros minutos frente al arco de Roberto, pero fue el rival que el supo desnivelar la historia al otro lado.
En media hora de juego, Arsenal siempre pareció estar más cerca del triunfo pero fue el Olympiakos el que encontró la apertura de la cuenta. Los griegos, fieles a su libreto, resistieron atrás los momentos malos y supieron aprovechar las licencias de una defensa que preocupa. No defiende, no marca y además comete errores. Felipe Pardo anotó el 1-0 y lo volvió a demostrar.
De la mano de Alexis, Arsenal se despertó tras el gol. El chileno, de los mejores siempre en los 'Gunners' habilitó de forma notable a Theo Walcott un minuto después y así llegó empate y la oportunidad de un nuevo comienzo. No fue así. En la disputa golpe a golpe, otra vez Olympiakos sacó ventajas y tras un error-autogol de David Ospina, aumentó para irse en ventaja al descanso.
En la segunda mitad, los locales recuperaron el entusiasmo y el juego. En ráfagas aparecieron Ozil, Cazorla y Oxlade-Chamberlain, pero nuevamente fueron Walcott y Sánchez los que tenían la llave para remontar. Ambos se cambiaron los roles, y ahora fue el chileno el que anotó tras gran asistencia del inglés a los 65 minutos.
Pero entonces nuevamente los errores, las fisuras y las desconcentraciones. Lo inexplicable. Otra vez, Arsenal no fue capaz de aguantar el empate más de un minuto, y Olympiakos lo pasó a ganar definitivamente a través del recién ingresado Finnbogason.
Faltaban más de 20 minutos, pero el partido terminó ahí. El Arsenal se siguió creando opciones, llegó incluso de forma clara al arco de Roberto, pero el problema mayor estaba en la cabeza y contra eso no había nada que hacer.
En la falta de confianza y la confusión, estuvo gran parte de las razones de la derrota. El Arsenal tuvo fuerzas para igualar las cosas, pero nunca pasar arriba en el marcador. Los errores lo pagaron demasiado caro y la próxima jornada deberá jugarse sus últimas opciones ante el Bayern Munich. De seguir en esta línea, la eliminación parece zanjada.