El chef que es ‘refuerzo’ del equipo sorpresa del fútbol chileno: “Todo ha sido una vivencia nueva”

La buena campaña de Puerto Montt en el Campeonato de Segunda División no solo atrae por el correcto desempeño de los dirigidos por Jaime Vera. También por un hecho bien particular en medio de las dificultades económicas que enfrenta el club: el plantel cuenta con su propio chef y, en cada concentración, los sureños autogestionan su propia alimentación para aligerar, de alguna manera, los gastos. Se trata de Freddy Lazcani, quien conversó con AS, contando detalles de su novedosa labor.

“Esto surgió de un trabajo en conjunto con la nueva directiva para darle una buena alimentación a los jugadores. Con las calorías que ellos necesitan y también asesorados por una nutricionista, que define lo que ellos necesitan para que el trabajo en la cancha salga bien”, afirmó Lazcani.

- ¿Acompaña al plantel principalmente durante las concentraciones?

- Sí, todos los fines de semana. Durante la semana, también se les entrega alimentación a los jugadores en el estadio, pero ahí yo no estoy. En las concentraciones voy con otro joven que es el que me ayuda. Él compra todas las cosas que nos ordena la nutricionista y en base a eso yo les preparo las comidas. Tenemos nuestros implementos para cocinar y donde viajemos nosotros tenemos todo.

- ¿El plantel se concentra en algún lugar que cuente con cocina, por supuesto?

- Sí, claro, tiene que ser así. Que sea un ambiente adecuado, no son lugares lujosos, como en otros equipos, ya lo sabemos, porque los presupuestos no están para pagar un hotel tan caro. Nosotros nos adecuamos a todo, los chicos entienden y el profe (Jaime Vera) también. Hasta ahora todo ha salido súper bien.

- ¿Fue difícil concretar la idea una vez que esta surgió?

- Esto lo propuso don Elías Lazcani, es mi primo y, como yo me dedico a esto, me dijo si lo podíamos hacer. Yo he estado con otros equipos y tengo algo de experiencia. Aparte de eso, la nutricionista nos está apoyando, ella está todos los días con nosotros. Va planteando lo que tengo que cocinarles a ellos, con una minuta. Todo es en conjunto.

- ¿Cómo lo recibió el plantel?

- Los muchachos son todos jovencitos, muy tranquilos. Hasta el momento no hemos tenido ningún problema. Acatan las órdenes del profe y de los que los estamos alimentando. Ha sido súper especial, se ha formado como un vínculo familiar más que nada. La nutricionista es la que manda, yo sigo sus órdenes y los chicos igual.

- ¿Encuentran buena la comida?

- Sí, súper buena. La verdad es que no he tenido ninguna queja. El profe me ha felicitado, me ha dicho que la alimentación ha estado muy bien. Es un poco distinta a lo que él está acostumbrado, pero nos hemos adecuado bien. Todos se sirven su comida, ahora les estamos dando harto consomé. Eso les gusta a ellos. También a los chicos que no tienen muchos recursos, los ayudamos con la alimentación para que el día a día sea bueno para ellos y puedan entrenar de manera adecuada.

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- ¿Qué tal la vivencia de ser parte de un staff técnico y compartir la intimidad de la competencia profesional?

- Todo ha sido una vivencia nueva, pero me lo he tomado como si fuera una familia. Estamos conectados con los jugadores, nos conocemos, nos vemos regularmente. Si necesitan alguna cosita en la comida, lo hablamos. Les hemos hecho exámenes por si alguno tiene alguna alergia alimentaria. Ya estamos todos acomodados y si llegamos a perder, con más ganas vamos a seguir trabajando. Quiero ver a Puerto Montt triunfar.

- ¿Lo que están realizando podría extenderse a otros clubes?

- Puede ser, por qué no. Creo que esto va a seguir avanzando. El equipo nuestro es un equipo joven. Ninguno de los que está acá es un jugador exitoso y los recursos no son los que tienen otros equipos grandes. Por eso, nosotros tenemos que cuidar su alimentación y el profesor además es bien estricto en los entrenamientos. En los primeros días se notaba que había como que una falta de alimentación. Eso lo hemos ido estudiando con la nutricionista, el kinesiólogo también lo ve y el profe me ha dicho que han ido aumentando las exigencias en los entrenamientos. En base a la alimentación que han tenido, han podido rendir.

- ¿Combina su labor en Puerto Montt con otros trabajos?

- Sí, tengo otros trabajos, pero el día de concentración me aboco solo a Puerto Montt. Yo vivo en Chillán y mi familia es de Puerto Montt, pero también he vivido allá, así que soy como un puertomontino más. Esto empezó antes del inicio del campeonato y me comprometí con los dirigentes. Ahora soy el chef de corazón de Puerto Montt. Ya tengo 44 años y me dedico a esto como de los 20 años. Cuando jugamos de local, viajo uno o dos días antes y me pongo a preparar todo lo que tiene que ver con la alimentación.