Sepa dónde recurrir en Chile si sufre un Accidente Cerebro Vascular (ACV)

El locutor radial y animador de televisión Leonardo “Leo” Caprile sufrió un infarto cerebral, del cual se está recuperando gracias a la prontitud de la atención. El ataque cerebro vasculares (ACV) es una patología que golpea fuerte en la población y en Chile afecta a cerca de 40 mil personas al año. Así surge la pregunta ¿qué pasa si tengo sospechas o síntomas? ¿A dónde recurrir?

Ante la alta incidencia de esta patología que afecta la vida y la calidad de vida de las personas y en todo el mundo, la Sociedad de Neurología, Psiquiatría y Neurocirugía de Chile (Sonepsyn) y la iniciativa “Angels”- Actúa con Velocidad”, del Laboratorio Boehringer Ingelheim, elaboraron un catastro de todos los recintos asistenciales privados y públicos que están equipados para tratar esta dolencia. De ellos, un alto porcentaje sobrevive al episodio, pero todo depende de la detección temprana de los síntomas y de la rapidez con la que se llegue a un recinto que pueda asistir al paciente.

Coinciden los especialistas y el Ministerio de Salud en que, en Chile, los principales factores de riesgo para ser víctima de un ACV incluyen la hipertensión arterial, el índice de masa corporal elevado (sobrepeso/obesidad), glucemia en ayunas elevada, dietas poco saludables, niveles elevados de colesterol LDL (colesterol “malo”) y el tabaquismo.

El ACV es una afección que se presenta de manera súbita y que provoca la pérdida de una función neurológica. La mayoría de los ACV se manifiestan con tres signos fácilmente identificables: asimetría en la cara (conocida como “cara chueca”), dificultad para hablar (lenguaje ininteligible) y debilidad en un lado del cuerpo (caída de un brazo al intentar levantar la mano). La presencia de uno solo de estos signos de aparición repentina puede indicar una alta probabilidad de estar sufriendo un ACV. En tal caso, es crucial que el paciente sea evaluado de inmediato en un centro de salud de urgencia hospitalaria.

La evaluación tiene que ser ágil, trasladarse rápido al servicio de urgencia, donde debe hacerse la evaluación lo más rápidamente posible.

El Ministerio de Salud tiene una estrategia que se llama Código ACV, que consiste en que todo el personal involucrado en la urgencia sabe de antemano cuáles son sus funciones, las cuales muchas veces son en paralelo, precisamente, porque se busca usar el beneficio del tiempo a favor del paciente.

Es vital conocer entonces dónde concurrir ante un evento como este, en cualquier zona del país, ya que, como han confirmado los expertos, por cada minuto que pasa con una arteria tapada, mueren en promedio dos millones de neuronas.

Más información puede obtener en las redes sociales de la Sociedad de Neurología, Psiquiatría y Neurocirugía de Chile (Sonepsyn), la Asociación Chilena de Enfermedades Vasculares Encefálicas (ACEVE) y la iniciativa Actúa con Velocidad.

Ampliar