Chinche del Arce: especialistas de la Universidad de Chile explican qué hacer en caso de picaduras y reacciones alérgicas
El insecto habría llegado en un vuelo desde Norteamérica y ya exhibe visos de plaga en varios sectores de Santiago.
El Chinche del Arce es un insecto que se alimenta de plantas y árboles. Proviene de Estados Unidos y México, y se estima que llegó al país en algún vuelo desde Norteamérica. En la actualidad, se ha consignado su presencia hasta Guatemala y ahora en Chile.
En algunos sectores de Santiago exhibe visos de plaga. Colonizó rápidamente arces ornamentales que están presentes en plazas, jardines públicos, calles y también en algunos jardines privados.
Ingreso a hogares
El clima templado de la capital ha favorecido la proliferación del Chinche del Arce, así como también la falta de depredadores naturales. Con el inicio de la temporada más fría del año, en todo caso, este panorama podría cambiar.
“El ingreso a las casas es una realidad, porque buscan lugares protegidos. Por lo tanto, y, por tanto, pueden situarse en grietas de pisos, en paredes, en suelos de jardines. Se ha descrito ingreso a casas en el Hemisferio Norte”, afirmó Pedro Cattan, profesor de la Facultad de Ciencias Veterinarias y Pecuarias de la Universidad de Chile.
Picaduras
No es recurrente la picadura del insecto, pero sí han existido algunos hechos. “Se han visto casos de picaduras con efectos adversos, principalmente por la generación de respuesta antigénica que no suele ir más allá de una respuesta local en el sitio de la picadura”, reveló, por su parte, Jeannette Dabanch, infectóloga del Hospital Clínico de la Universidad de Chile.
Sin embargo, la profesional precisó que “este insecto no constituye un riesgo conocido de salud para las personas. Hasta ahora, no ha sido relacionado con la transmisión de agentes infecciosos”.
Cattan, en tanto, agregó que “lo mejor es eliminar todo aquello que pueda transformarse en refugio para el insecto. Si desaparece en invierno, lo más razonable es cerrar todo tipo de hoyos, perforaciones, rotura de zócalos, eliminar malezas y hierbas”.
Finalmente, la doctora Dabanch aseguró que “para la eliminación es importante evitar el contacto directo del insecto con la piel, ya que esto podría generar reacciones alérgicas”.