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El milagro de la Laguna Aculeo: el fenómeno que alegra a Chile, explicado por un doctor en Educación Ambiental
El geógrafo y doctor analiza la regeneración de una zona que estuvo cerca de desaparecer y que es clave para la Región Metropolitana.
La Laguna de Aculeo enfrenta uno de sus mayores desafíos: transformarse en un humedal urbano que priorice la conservación y el respeto por su frágil ecosistema, plantea en su columna de El Mostrador, el académico de la UDP y doctor en Educación Ambiental, Felipe Kong López.
Durante décadas, este espacio fue un ícono recreativo, pero el impacto ambiental y la sequía llevaron a su desaparición. Ahora, con sus primeras señales de regeneración, es crucial orientar los esfuerzos hacia su restauración sostenible.
El impacto de las actividades recreativas en Aculeo
A pesar de los avances en su recuperación, actividades como el uso de lanchas a motor amenazan los logros alcanzados. Estas prácticas, además de perturbar la fauna local, contribuyen a la contaminación del agua y aceleran la erosión de las orillas. Limitar estas actividades y regular el acceso son pasos esenciales para garantizar que la regeneración de Aculeo continúe.
Bajo el marco de la Ley N.º 21.202 sobre Humedales Urbanos en Chile, proteger Aculeo aseguraría su función como refugio para la biodiversidad, mitigador del cambio climático y regulador natural del agua. Además, este proyecto permitiría alinearse con compromisos internacionales, como los objetivos de la COP16 de Biodiversidad, que buscan restaurar el 30% de los ecosistemas degradados para 2030.
Un espacio educativo para la Región Metropolitana
Convertir Aculeo en un humedal urbano también representa una oportunidad para la educación ambiental. Este espacio podría ser utilizado como un aula al aire libre, donde comunidades locales y visitantes aprendan sobre la importancia de los ecosistemas de agua dulce. Investigadores como Tilbury y Wortman destacan que el contacto directo con entornos naturales fomenta una actitud más consciente y responsable hacia el medioambiente.
La restauración de Aculeo no solo beneficiará la biodiversidad, sino que también ofrecerá un espacio accesible para la recreación responsable, contribuyendo a mitigar desigualdades socioambientales y fortaleciendo el compromiso de las comunidades con la sostenibilidad. Transformarlo en un símbolo de conservación garantizará un futuro más armónico entre las personas y la naturaleza.