Inchcape adquiere Derco: cómo queda y qué pasa con la familia Del Río
El negocio de la distribución automotriz en el país se remeció con la operación entre las empresas británica y chilena, marcando un giro en el rubro a nivel nacional.
Una importante negociación sacude el ámbito empresarial chileno. Inchcape, una de las principales distribuidoras automotriz multimarca independiente a nivel mundial, llegó a un acuerdo para la compra Derco, compañía similar pero a nivel nacional y que es propiedad de la familia Del Río.
De todas maneras, la operación debe obtener el visto bueno de las autoridades comerciales en el país. Quedó sujeta al cumplimiento de las condiciones de la transacción y a la aprobación de las entidades regulatorias. Esto ocurriría a fines de 2022 o a principios del próximo año.
Nuevo escenario
Uno de los directivos de Derco, Edmundo Hermosilla, se refirió a la negociación: “Esta asociación es un gran salto que nos permitirá formar parte de un líder mundial en la distribución de automóviles. Desde que fue fundada por José Luis del Río Rondanelli, el crecimiento y la internacionalización siempre han formado parte de la visión de Derco”.
Inchcape es uno de los principales distribuidores mundiales multimarca de automóviles. Tiene actividad en más de 40 mercados y cuenta con una cartera de las principales marcas de automóviles. En nuestro continente ingresó a comienzos de la década de 1999, distribuyendo vehículos nuevos y repuestos de BMW en Chile y Perú. Hoy, actúa en más de 11 mercados y territorios en toda América del Sur, Central y Caribe.
La familia Del Río
Derco es un distribuidor automotriz multimarca de propiedad familiar, que fue fundado en 1959 por José Luis Del Río Rondanelli. Hoy, sigue siendo 100% propiedad de Juan Pablo, Felipe y Carolina Del Río. Es una de las mayores empresas en el rubro automotriz multimarca independiente por volumen en América Latina y opera con 329 concesionarios en Chile, Colombia, Perú y Bolivia.
Gracias a la operación, los accionistas de Derco (Ia familia Del Río) podrán incorporarse a la propiedad accionaria de Inchcape, incluyendo también el derecho a designar un director en la compañía. Los inversionistas se convertirán así en accionistas de la empresa británica con un 9,3% de la propiedad.