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La Roja

La 'Era Sampaoli' no tendrá por primera vez sus tres amuletos

El DT no podrá contar para el choque amistoso ante Paraguay con el lesionado Charles Aránguiz y los ausentes Claudio Bravo y Eduardo Vargas.

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La 'Era Sampaoli' no tendrá por primera vez sus tres amuletos

Por primera vez desde que dirige a la selección chilena, Jorge Sampaoli no tendrá disponibles para un mismo partido a tres de sus amuletos. Los ausentes, de hecho, son parte de la columna vertebral de la Roja.

La 'Era Sampaoli' no tendrá por primera vez sus tres amuletos

Por distintas razones, Eduardo Vargas, Charles Aránguiz y Claudio Bravo no estarán en el amistoso del próximo sábado frente a Paraguay. Nunca habían coincidido los tres ausentes y el del sábado será una buena prueba para Chile desmustre ser un equipo y no una suma de individualidades. Justamente, el reto del seleccionador es encontrar sus reemplazantes.

Sobre todo el del ‘Príncipe’, quien no estará en al menos las primeras cuatro fechas de las clasificatorias. Es ahí donde se anuncia la lucha más dura para quedarse con una camiseta de titular y proyectarlo al debut del camino a Rusia 2018 ante Brasil.

¿Alternativas? David Pizarro, Matías Fernández y Felipe Gutiérrez, en ese orden, corren con ventaja. Ninguno, eso sí, tiene la capacidad de marca del ex Universidad de Chile y en el aspecto físico también están algunos peldaños más abajo.

Por eso no sería descabellado, algo que ronda en la cabeza del DT, retrasar a Arturo Vidal al puesto de Aránguiz y posicionar más adelantado a Matigol.

De aquella situación también dependerá el compañero de Alexis Sánchez en ataque. El casildense tiene en la nómina a Ángelo Henríquez, Mauricio Pinilla y Junior Fernandes para esa posición.

Al menos en Copa América fue Henríquez quien sumó más entrenamientos con el grupo titular cuando el Niño Maravilla debía descansar de sus dolencias musculares. Él, de hecho, tuvo más minutos que Pinigol en el torneo continental.

De todas formas, conocido es el gusto del estratega por el 4-5-1 o bien, un 3-6-1, con volantes bien abiertos y que lleguen constantemente a apoyar al tocopillano. La idea de un solo atacante también es una alternativa válida para el DT.

Donde prácticamente no hay dudas es en el arco: cada vez que Bravo no estuvo a disposición en los partidos clase A, fue Johnny Herrera el encargado de custodiar los tres palos de la selección chilena.