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UNIVERSIDAD DE CHILE

Pereira y Corujo, los más molestos tras la eliminación

Tras el 0-0 con River Plate, las 'caras largas' fueron la tónica en el camarín azul, pero hubo dos más molestos que el resto: Guzmán Pereira y Corujo.

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Pereira y Corujo, los más molestos tras la eliminación

El 0-0 entre Universidad de Chile y River Plate de Uruguay, resultado que dejó al equipo de Sebastián Beccacece fuera de la zona de grupos de la Copa Libertadores 2016, provocó un ambiente de funeral en el vestuario azul.

Pereira y Corujo, los más molestos tras la eliminación

Las 'caras largas' fueron la tónica de la jornada y, salvo Luis Fariñasólo el presidente Carlos Heller, el capitán Johnny Herrera y el propio técnico argentino hablaron tras el partido, quizá más por obligación que por gusto propio.

Claro que hubo dos que salieron con más cara de ´pocos amigos' que el resto: los uruguayos Mathías Corujo y Guzmán Pereira, quienes vieron todo el encuentro desde la banca.

Corujo, clave en toda la 'Era Lasarte', había actuado como titular en todos los partidos desde que asumió Beccacece, pero este martes -contra todo pronóstico- ni siquiera pudo ver minutos.

Fue uno de los primeros que saltó a calentar al césped del Nacional cuando ya se jugaba el primer tiempo. Los hinchas lo pedían a gritos, él trabajaba con más entusiasmo, pero el ex ayudante de Sampaoli ni se inmutaba.

En la segunda mitad, cuando ingresó Luis Felipe Pinilla, tercer cambio del DT rosarino, su cara evidenció un profundo malestar que se prolongó hasta la zona de camarines. Allí, el ex Cerro Porteño fue el primero en abandonar el vestuario, aún visiblemente molesto. Se sacó unas pocas fotos con hinchas que lo abordaron, no quiso hacer declaraciones ante la prensa y se devolvió, pero sólo para esperar a su compañero Guzmán Pereira, otro que venía 'en llamas'.

El ex Montevideo Wanderers es uno de los jugadores que más terreno perdió con la llegada de Beccacece. El volante uruguayo terminó siendo el estandarte del equipo que comandó hasta diciembre Martín Lasarte, pero en esta nueva era su rol es absolutamente secundario.

De hecho, sólo arrancó como titular en dos ocasiones: el primer partido ante Antofagasta y el último ante San Marcos de Arica, en una improvisada posición como defensa central. "Cabeza" está al tanto de que con Beccacece no es prioridad y el ver la eliminación de su equipo desde el banco de suplentes es una molestia que le será difícil ocultar en el día a día del vestuario azul.