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U. Católica - Colo Colo

El gran problema táctico que deben resolver Salas y Guede

En una fase del juego, ambos elencos afrontarán seguramente la misma dificultad este domingo. ¿Cuál es? ¿De qué manera se puede abordar?

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El gran problema táctico que deben resolver Salas y Guede

Universidad Católica vs Colo Colo en vivo

El gran problema táctico que deben resolver Salas y Guede

Universidad Católica y Colo Colo animarán otra versión del clásico, en San Carlos de Apoquindo. Los cruzados deberán sortear una compleja prueba en su afán de seguir ilusionándose con el bicampeonato y, para ello, existe un aspecto táctico, ante el Cacique, que será vital en la resolución del encuentro.

El asunto tiene que ver con los Sistemas de juego (ordenamiento de los futbolistas en la cancha) que emplean ambos elencos y también con las respectivas Organizaciones de juego (tareas y funciones asignadas a cada uno de los jugadores) en la fase defensiva del partido.

La UC ataca con tres hombres (Fuenzalida, Castillo y Noir), más los desdoblamientos del volante ofensivo (Buonanotte), del mediocampista de contención adelantado (Kalinski) y del lateral de rigor proyectado (Álvarez -reemplazará a Magnasco- o Parot). En total, un bloque integrado por seis hombres.

Colo Colo defiende con una línea de cinco (tres zagueros, Zaldivia, Barroso y Baeza, y los dos carrileros, Figueroa y Rodríguez). A esta, se agrega por delante el volante Esteban Pavez. A saber, entonces, una estructura de seis jugadores. Jaime Valdés se excluye, porque lo suyo es más ocupar un espacio que intervenir protagónicamente en la recuperación del balón.

Por lo tanto, habrá igualdad numérica entre ambos bloques, lo que es una solución solo de parche para el que defiende. El Equilibrio exige superioridad en cuanto a hombres del equipo que custodia su portería para garantizar la Cobertura (estar en situación de cubrir al compañero si es superado). Si no hay supremacía numérica defensiva, se debe abandonar una marca para respaldar al jugador que presiona. Un gran peligro en las inmediaciones del área penal.

Claramente puede haber ventaja para la UC en este situación del juego del domingo. Si Colo Colo defiende con igual número de unidades que su oponente, es muy factible que los locales encuentren espacios para la Penetración (ganarle la espalda a la defensa adversaria) y así acercarse al gol.

Ahora bien, en la fase ofensiva de los albos puede pasar exactamente lo mismo. El Cacique ataca con cuatro hombres (Figueroa, Paredes, Rivero y Rodríguez), más Fernández y Valdés. Seis jugadores en total.

Los cruzados defienden con su línea de cuatro (Álvarez, Lanaro, Maripán y Parot), más la asistencia de los dos mediocampistas centrales (Fuentes y Kalinski). Un bloque de seis futbolistas.

También se genera igualdad numérica, por lo que la UC puede experimentar las mismas dificultades defensivas de los albos al ser atacada. Por ende, un asunto será clave en este aspecto: el compromiso táctico defensivo de los que no intervienen directamente en la recuperación del balón.

Cómo Paredes, Rivero, Fernández y Valdés, por Colo Colo, y Buonanotte, Fuenzalida, Castillo y Noir, en Católica, les echan una mano -permanente y eficaz- a los que defienden con el fin de conseguir la superioridad numérica que todo proceso defensivo adecuado precisa. Esto ya es un tema de Organización de juego (tareas y funciones asignadas a cada uno de los jugadores) y ahí los técnicos, Mario Salas y Pablo Guede, tendrán un rol crucial.

La UC tiene un poco andado el camino con los repliegues de Fuenzalida y Noir. Es un comportamiento recurrente en ambos aleros para apoyar a los laterales, conformando sendas dualidades defensivas en los costados de la zaga. De esta manera, los cruzados obtendrían la superioridad numérica requerida.

En Colo Colo, da la impresión que el asunto no está resuelto. Los carrileros (Figueroa y Rodríguez) tienen problemas en los retrocesos por su ADN de hombres ofensivos. En el empate (3-3) ante San Luis hubo dificultades al respecto. ¿Una solución? Que su ubicación inicial en la cancha sea unos metros más atrás, marcando inicialmente a los punteros cruzados. Solo si la cobertura está gararantizada por el zaguero del costado, salir a presionar a los laterales en su desdoblamiento.