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Auditoría Sifup

Carlos Soto se defiende de las acusaciones: "Fue una trampa"

El ex presidente abordó los millonarios gastos sin justificar que dejó su gestión en el Sifup. "Me dijeron que me iban a cuidar, a proteger", afirmó.

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Carlos Soto se defiende de las acusaciones: "Fue una trampa"

Después de divulgarse la auditoría que reveló gastos sin justificar por 151 millones de pesos en el Sifup, el ex presidente y ahora renunciado director del organismo, Carlos Soto, hizo sus descargos en torno a las acusaciones sobre su gestión.

"Fue una trampa, yo por eso renuncié. Me dijeron que me iban a cuidar, a proteger, cuando se supo el informe (de la auditoría) para aclarar las cosas. No ocurrió así", señaló el ex dirigente gremial en Radio Sonar.

Sobre un millonario gasto en ropa Zara, Soto aseguró que "compramos 14 trajes para todos los que participamos de la entrega de premios de la ANFP. Lo mínimo era estar decentemente presentados".

En relación a los egresos para la adquisición de biblias afirmó que "por fe, profesamos el cristianismo y son libros que se le regalaban a los jugadores".

Uno de los gastos más cuestionados guarda relación con la adquisición de un pijama. "Eso no es culpa nuestra, es un delantal para una señora que hace aseo", aseguró el ex directivo sindical.

También se refirió a una controversial donación de un millón de pesos a la iglesia evangélica de la que es pastor el ex tesorero del organismo Julio Pastén. "Nos equivocamos", dijo.

Finalmente, Soto explicó la falta de consulta a la asamblea del Sifup para incurrir en millonarios gastos. "Si hubiese sido así, tendríamos que haber consultado la vez que le enviamos cinco millones de pesos a Pablo Otarola (ex jugador de Temuco) quien quedó inválido. O cuando mandamos 500 mil pesos para que Armando Tobar pudiera salir de la clínica antes de morir".