¿Existen alimentos contra la gripe?
“Ningún alimento es capaz por sí mismo de curar el resfriado o la gripe, igual que ningún medicamento puede hacerlo”, afirma la doctora Isabel Belaustegui.
Ya estamos de pleno en la campaña de la gripe, empiezan catarros, afonías, fiebres… y al final uno no sabe por dónde le llega el malestar. Porque los cambios de temperatura, las calefacciones, el salir muy pronto de casa, realizar mucho deporte al aire libre con el frío… puede llevarnos a padecer por unos días las temidas gripes. ¿Existen alimentos contra la gripe? Es lo que hemos querido saber con la doctora Isabel Belaustegui Trías, a quien hemos entrevistado para Deporte y Vida.
¿Las infusiones son un buen aliado?
Las infusiones son el gran aliado contra la gripe: nos hidratan a la vez que nos aportan calor, nos ayudan a eliminar toxinas producidas por la batalla contra los gérmenes (o favorecedoras de las infecciones por éstos) y aportan elementos curativos. El agua caliente con miel, limón y jengibre, por ejemplo, es un excelente remedio para la congestión nasal, la mucosidad, la irritación de garganta y la tos.
¿Debemos pensar en los super alimentos como complemento perfecto?
Los superalimentos son alimentos de baja densidad calórica, que aportan cantidades importantes de fibra, vitaminas y minerales y con alto contenido en fitonutrientes y antioxidantes como las vitaminas A y E y el betacaroteno. Todos estos nutrientes son fundamentales para nuestras defensas, por lo que los superalimentos son un buen complemento de la dieta para potenciar los efectos beneficiosos que la alimentación puede tener sobre la salud.
No obstante, considero que una buena dieta es fundamental para el mantenimiento de la salud y, más allá de una sustancia milagrosa que resuelva unos u otros síntomas, lo importante es hacer un abordaje más global. Lo que debe ser súper es el conjunto de la dieta. Más aun, lo que debe ser súper es nuestro estilo de vida. No valdrá de nada hacer una vida sedentaria, dormir menos de lo que requerimos, permanecer en espacios cerrados bajo luz artificial, vivir en un estado constante de estrés y alimentarnos de productos procesados carentes de nutrientes y cargados de aditivos… y tomar un súper-alimento. ¡No tiene ningún sentido!
Ningún alimento es capaz por sí mismo de curar el resfriado o la gripe, igual que ningún medicamento puede hacerlo. Son las propias defensas del organismo las que deben vencer al virus. Por eso lo que necesitas es una adecuada alimentación que fortalezca las defensas naturales de tu sistema inmunitario.
Las recetas de la abuela, un caldo caliente, unas buenas lentejas, ¿son siempre una buena idea?
En las recetas de la abuela encontramos la manifestación clara de cómo la forma de cocinar los alimentos influye en el poder curativo de éstos: el calor cura estados de debilidad energética e inmunológica, el frío en cambio aligera la inflamación y disipa la energía, que también puede ser necesario en determinados casos. Los guisos, las sopas calientes, los purés de verduras y otros platos cocinados a fuego lento son ideales para la gripe y las épocas frías del año.
Y eso por no hablar de otro componente fundamental de la cocina de las abuelas: el amor que le ponen a los guisos. Por estudios que se llevaron a cabo en orfanatos del este de Europa en el siglo pasado, hoy sabemos que el amor es, literalmente, un alimento fundamental para el ser humano.
A veces, sin embargo, también es buena idea escucharnos y dejar de comer cuando no tenemos hambre: la falta de apetito que se da cuando estamos enfermos es un mecanismo de ahorro de energía digestiva para dedicarla a un fin más importante en esos momentos, la recuperación de la enfermedad. Un ayuno puntual no es perjudicial y puede ser una gran ayuda para restablecer la salud.
La jalea real, vitaminas, vitamina C de naranja, kiwi... ¿son buenos aliados para prevenir la gripe?
Sustancias como la jalea real o los alimentos ricos en vitamina C son buenos aliados para combatir la gripe.
La jalea real es el alimento segregado por las abejas obreras para alimentar a las abejas reina, con lo que estas consiguen mayor desarrollo corporal y una vida más larga (viven hasta 4 años, comparado con los 50 días de las abejas obreras). Aunque en ocasiones se han idealizado y exagerado sus efectos, parece confirmada la acción nutritiva y tonificante de la jalea real. Se recomienda su uso como tonificante en caso de astenia y agotamiento físico, en estados de inmunodeficiencia por bajada de defensas, en enfermedades infecciosas crónicas y en gripes y resfriados.
Los propóleos también pueden ser interesantes. Son sustancias menos conocidas, producidas también por las abejas a partir de resinas de diversos árboles, para proteger la colmena de microorganismos patógenos. Tienen un poder antibiótico natural, antivírico, antifúngico (contra Candida albicans), antitusígeno y antiinflamatorio de vías respiratorias.
Los alimentos ricos en vitamina C, como los cítricos, la acerola, la guayaba, la grosella y el kiwi, ayudan al sistema inmune a combatir los virus.