Anotó dos, pero Lewandowski hizo tres: la cara de Haaland tras la actuación del polaco

Estaba destinado a ser su noche. Jugaba contra el campeón de Europa en el Allianz Arena y empezó como una apisonadora. Su doblete antes del minuto 10 auguraba una resaca de partidido repleto de elogios, alabanzas y portadas. Pero llegó Lewandowski.

El polaco respondió a su doblete con un hat-trick que dejó en nada su inicio arrollador. Es por eso que la televisión no le quitó ojo. Primero con un plano nada más marcar el del Bayern el 2-2 que igualaba su doblete y, al final del partido cuando ya se había retirado por lesión, su cara en el banquillo era todo un poema incluso cuando Flick fue a saludarle.

Todo un carácter ganador de campeón de alguien que odia perder.