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SELECCIÓN CHILENA

El peor partido de la era Lasarte

Aunque mostró una reacción y bordeó el empate, la Roja cayó sin apelación ante Colombia, exhibiendo un nivel de juego lejano a lo hecho antes con el DT uruguayo.

Actualizado a
El peor partido de la era Lasarte
JAIRO CASSIANI/VIZZOR IMAGE/PHOTOSPORT

Pasó lo que se temía y Chile cayó ante Colombia en Barranquilla, diluyéndose cada vez más la opción de que la escuadra nacional puede clasificarse al próximo Mundial de Qatar. Lo peor de todo es que la Roja protagonizó el partido más bajo desde que Martín Lasarte asumió la dirección técnica del plantel en reemplazo de Reinaldo Rueda. Antes, el cuadro nacional dejó la sensación de cierta consistencia de juego, pese a los otros resultados adversos. Sin embargo, en esta ocasión la volatilidad futbolística golpeó fuerte y tuvo causas muy llamativas.

Sin cohesión

Estaba claro que, por el nivel del rival y las características climáticas del escenario del duelo, la Selección se movería con prudencia ante los colombianos, con un énfasis mayormente defensivo sobre todo en los primeros minutos. Así ocurrió, pero el equipo chileno careció de cohesión para que los esfuerzos individuales en la Presión tuvieran un efecto colectivo, impidiendo el accionar del rival en la construcción de juego. Por largos pasajes, la Roja fue solo un grupo de hombres intentando defender cada uno por su cuenta, con las distancias de relación apropiadas (equipo corto), pero sin las intervenciones individuales que tornaran funcional el bloque medio o bajo de recuperación del balón.

Lejos de Bravo

Asimismo, Chile intentó defender con cierta lejanía del arco defendido por Claudio Bravo. Esto tuvo éxito en el gol de Colombia que el VAR anuló, pero posteriormente el adelantamiento de la última línea fue más funcional a los ataques rivales que al objetivo de mantener a salvo la propia portería. Así surgió el 2-0 de los locales, cuando tras un pase vertical Miguel Borja ingresó solo por el centro para batir a Bravo. Lo mismo pasó en el gol que increíblemente se perdió Santos Borré. Los defensas achicaban correctamente, pero esto no tuvo un correlato con la presión que debían ejercer las otras dos línea para bloquear los pases de los colombiano ni con la marcas persecutorias hacia el área de los integrantes de la última línea. En esto, solo Gary Medel quebró la pasividad con esforzados repliegues de última instancia.

1 vs 1 débil

Estaba claro desde un comienzo que Colombia iba a controlar las acciones, obligando a Chile a defender durante gran parte del partido, como efectivamente ocurrió en la totalidad del primer tiempo. Sin embargo, llamó la atención la fragilidad que mostraron los nacionales en los duelos por interrumpir el juego o recuperar el balón. El anuncio lo dio Juan Fernando Quintero al eludir fácilmente a Jean Meneses y luego no recibir presión alguna cuando anotó de distancia y luego el gol lo anuló el VAR. En la acción del penal para el 1-0 sucedió lo mismo: Paulo Díaz se apuró en el mano a mano ante Luis Díaz y le cometió infracción. Se echó de menos la agresividad individual en las marcas mostrada en los partidos previos contra Brasil y Ecuador.

Falta de salida

Mauricio Isla volvió a actuar como volante externo derecho, tal como en el duelo contra los ecuatorianos en Quito, y recién en el segundo tiempo retornó a su puesto original cuando Lasarte realizó tres sustituciones, intentando reconfigurar el equipo. La reedición de la dupla del lateral del Flamengo con Paulo Díaz no tuvo el efecto deseado, puesto que Chile no mostró solidez por ese sector y, lo más importante, en los momentos en que manejó el balón el equipo tampoco tuvo salida clara y fluida por la zona derecha. Eugenio Mena y Jean Meneses, la contraparte en la izquierda de la Roja, incidieron algo más en el juego ofensivo durante el complemento. Generaron algunas acciones de profundidad y siempre estuvieron disponibles, en el rol de apoyo externo, en la elaboración de juego.

Sin '9 aguantador'

Una de las principales misiones que iba a tener Iván Morales, como único centrodelantero, consistía en retener el balón para permitir en avance del resto de las líneas e ir así ganando terreno en los avances para alejarse de Bravo. El ariete de Colo Colo fue poco abastecido de juego, interviniendo solo en algunas ocasiones, pero cuando lo hizo se le vio errático con la pelota en los pies. Por lo mismo, no se pudo concretar la intención de que el '9' chileno 'aguantara' la marca entre los centrales rivales, permitiendo así la llegada principalmente de los mediocampistas. En lo que sí no falló el albo fue en la disposición para correr a todos los balones, sin transar en la entrega. Lasarte intentó modificar esto con el ingreso de Luis Jiménez y con el capitán de Palestino Chile logró tener más el balón en esa zona del ataque, pero de todas formas fue insuficiente para variar el curso del partido.