Entrevista AS
El arquero chileno que es asesor inmobiliario: "Me abrió los ojos"
Richard Leyton (35), además de ser futbolista, lidera la franquicia Golden Bull Six, que se dedica a aconsejar a potenciales compradores de viviendas.
En 2015, Richard Leyton (35) cumplió uno de los grandes sueños de su vida: tener su casa propia. Sin embargo, lo que siempre había deseado, al poco tiempo, se convirtió en un problema. El arquero dejó la ciudad donde compró su vivienda y partió a otra por su carrera como arquero. Fue así como tuvo que mantener por varios meses dos casas: la suya y la que debía arrendar. Esa situación lo hizo abrir la mente. El actual arquero de Deportes Copiapó se metió de lleno en el estudio del mercado inmobiliario.
"No me alcanzaba para mantener las dos casas, así que la mía tuve que ponerla en arriendo. Lo hice por poco más de cuatro años", dice Leyton en charla con AS Chile.
¿Qué hizo entonces? "Tomé la decisión de comenzar a estudiar. Leí muchos libros sobre inversión inmobiliaria e hice cursos al respecto, hasta que lo entendí". ¿Resultado? Además de futbolista, hoy es asesor inmobiliario en la empresa Golden Bull Six, franquicia de Golden Bull.
"Manejo esa franquicia, por lo que me permite tener mi propio equipo de trabajo. Llevo aproximadamente cuatro meses en ella y dos años y medio dentro del rubro", indica.
- ¿Cómo surge la idea de trabajar en esta área?
- Siempre tuve el bichito de comprar algo para arrendar, desde chico, pero siempre fue -y sigue siendo- muy complejo para nosotros los deportistas por tener contratos a plazo fijo y nos consideran, entre comillas, un cliente riesgoso. Entonces, estando en Curicó, pude comprar mi primera casa propia. La habité tres semanas o un mes y me tuve que ir de la ciudad por cambiarme de club. Estuve obligado a arrendarla, porque mis condiciones económicas también habían cambiado, dado que me fui a un club de Segunda División. Pasó el tiempo e Ignacio González me recomendó leer libros sobre el tema y me abrió los ojos.
- ¿Cuáles fueron los pasos a seguir después?
- Él mismo (González) con el correr del tiempo me ayudó a invertir y hoy soy inversionista. Eso me ayudó para seguir ayudando a más personas. Es sabido que no he jugado en equipos grandes, no soy el futbolista que recibe grandes sumas de dinero mes a mes, pero así y todo, siendo ordenado y entendiendo de qué se trata pude lograr invertir.
- Ya tiene múltiples propiedades entonces...
- Exacto. La primera la vendí y con la plata que se generó de ganancia pude invertir en más. Hoy tengo varias que están destinadas solo a arrendar, para que se vayan pagando solas. Ese es el objetivo. Obviamente hay que contar con factores como el valor, la ubicación, la demanda, que es a lo que me dedico: decir las cosas como son y no comprar por comprar.
- ¿Cuántos clientes tiene en la actualidad?
- Ufff, te podría decir que a lo menos tengo una reunión diaria. De ahí a que se genere el cierre del contrato es otra cosa, porque la gente escucha y le queda dando vuelta, pero gran parte de mis tardes las ocupo para hacer reuniones de manera online.
- ¿Lo puede compaginar bien con su profesión?
-Totalmente, porque es como freelance (ríe). Si no puedo estar en una reunión en la mañana explico por qué no, y nos vamos acomodando. Muchas veces tengo reuniones a las ocho o nueve de la noche porque son las horas donde generalmente las personas están más tranquilas.
- ¿Usted tiene un sueldo fijo allí o gana dinero según las comisiones de cada acuerdo?
- Nosotros no cobramos comisión por nuestras asesorías, independiente de si la persona compra o no. Hasta el momento de la escritura no se cobra nada. La retribución económica para nosotros son comisiones que nos pagan las inmobiliarias con las que tenemos convenios. En el caso de la entrega inmediata, se paga una vez firmada la escritura y en los casos de compras en verde o blanco se paga un porcentaje en el momento de la firma de la promesa y otro en la firma de escritura.
Los colegas futbolistas que ya confiaron en Leyton
Manuel López, ex goleador de Copiapó y Leandro Díaz, actual lateral de Deportes La Serena, son algunos de los compañeros de profesión que confiaron en Leyton.
"Siempre lo he comentado con colegas que el futbolista vive en una burbuja. Hacemos lo que nos gusta y eso creo que pocas personas lo pueden decir. Pero cuando se acaba eso, a muchos los pilla de golpe, entonces por eso hay que empezar a prepararse", cuenta el golero.
"Mis clientes no son solo deportistas. Con el correr del tiempo ya empieza el boca a boca que ni siquiera son de mi círculo, pero me han ido recomendado y la empresa ha ido creciendo", cierra.