La periodista chilena que brilla en el deporte: “Con terapia me di cuenta que era mi modo de protección”
“Siento que soy una persona que le gusta mucho motivar a otros para que puedan llevar una vida saludable”, dice Macarena del Real a AS.
En junio pasado, Macarena del Real (27) se hizo viral por terminar en el segundo lugar en 37 kilómetros de Torrencial Chile, una de las carreras de ultra trail running más prestigiosas del país. Pero, ¿qué fue lo llamativo de esta historia? Que lo hizo siendo periodista full time de Mega, por lo que el tiempo de preparación era muy acotado. Aún así, lo consiguió.
“Fue una experiencia única”, cuenta Del Real a AS, con quien repasa la historia que la convirtió en una inspiración para muchos televidentes y seguidores.
“Cuando uno compite en carreras de larga distancia tienes que tener una preparación física importante para no lesionarte en la carrera. En el fondo es por eso, más allá de ganar o no ganar”, dice.
- ¿Cómo partió el vínculo con el deporte?
- Gracias a Benjamín, uno de mis hermanos. Con él siempre jugábamos fuera de la casa. No recuerdo una infancia habiendo jugado con muñecas, sino corriendo, jugando a la pinta, al fútbol, con bicis. Después, en el colegio, el profesor de Educación Física le pedía a los hombres correr 10 kilómetros, y a las mujeres, 5. Eso me lo empecé a cuestionar y empecé a tomarlo como un desafío. Y les fui ganando a mis compañeros.
- ¿Y cómo lo cultivó siendo adulta?
- Estudié periodismo en la Universidad de los Andes y yo vivía en Buin, entonces teníamos ventanas muy grandes y yo no me podía ir a mi casa, porque vivía super lejos, entonces ahí me iba al cerro a correr. Me decían ‘Montañita’. Andaba para todos lados con mi ropa de deporte, hoy lo sigo haciendo. Yo necesitaba estar activa mientras estudiaba y ahí fue cuando empecé a hacer más deporte en sí.
- Una cosa es hacer deporte, pero otra es competir. ¿En qué momento cambió el chip?
- Cuando empecé a hacer alta montaña me dieron ganas de prepararme. Después de correr 50 kilómetros en el ultra trail running me di cuenta que podía pasarme a la calle e intentar en el Maratón. Así he ido evolucionando en ambas.
“La mayoría de las personas que se sentaban a mi lado en el canal terminaron comiendo huevo duro o fruta”
- ¿Y a nivel personal cuánto la ha ayudado el deporte?
- De grande me di cuenta, con terapia y mil cosas, que siempre el deporte fue como mi modo de autodefensa o de protección. Estaba mal y me iba a trotar. Mientras peor estoy, más deporte hago. La gente que más me conoce se da cuenta.
- ¿Se siente una referente de la vida sana?
- Mira, no sé. No me siento una referente entre los deportistas porque no me formé como una. Sí siento que soy una persona que le gusta mucho motivar a otros para que puedan llevar una vida saludable y es por eso que yo empecé a subir el deporte que hacía a mis redes sociales. Muchas de las excusas que se pone la gente es el trabajo y yo empecé un poco a demostrar que sí se puede independientemente de que tengas una vida ajetreada, porque ser periodista es como casi no tener vida, sobre todo si uno trabaja en tele o en medios tradicionales. Te pongo un ejemplo...
- ¿Cuál?
- Yo me movía todos los días en bicicleta y llegaba con mi casquito y todo el mundo se cagaba en la risa cuando me veía llegar, porque más encima llegaba con mi ropa deportiva y después me cambiaban en la pega a ropa formal. Era otra persona (ríe).
- ¿Practica otros deportes?
- Natación, gimnasio, intenté cuando chica tenis, pero se me da mejor el pádel (ríe). Nadar tampoco creo que sea lo mío, pero me gusta. Tuve un momento en mi vida donde quizás tomé trago, alcohol, donde tuve fiestas en la universidad y todo, pero hoy soy alguien que tiene hábitos muy saludables.
- ¿Cómo trabajó mentalmente para llegar a eso?
- Leí una vez un libro que dice que a los vicios hay que esconderlos y a los hábitos hay que mantenerlos a la vista. El día anterior a ir a correr en una pista de atletismo, dejo toda mi ropa lista, entonces cuando me despierto y me suena la alarma lo primero que veo es el recordatorio de ir a hacer deporte.
- ¿Y cómo esconde los vicios?
- (Ríe) La comida rica la tengo escondida en un cajón para que no sea lo primero que vea cuando entro a la cocina. Lo primero que veo es la proteína, fruta y la verdura. Si me pongo a buscar, ahí sí aparecen los vicios (ríe).
- ¿Motivó a alguien en el canal?
- Te voy a dar un nombre: Pablo Cuellar. Hoy va al gimnasio gracias a mí (ríe). Motivé a mucha gente del canal. De hecho, entrené a un ex jefe que tuve, que este año corrió los 21 kilómetros del Maratón de Santiago. Lo entrené por la buena onda, porque no soy entrenadora profesional, pero con lo que fui aprendiendo gracias a mis coach, pude hacerlo. Yo le decía ‘coach no soy, pero sí te puedo entrenar’. Daniel Silva me hace la competencia... Siempre me dice ‘te voy a ganar algún día’. En verdad se armó un vínculo muy bonito con el deporte. Yo creo que la mayoría de las personas que se sentaban al lado mío terminaban comiendo huevo duro o fruta (ríe).