“Me pone feliz estar haciendo todo esto a mis 27 años y sin tener una carrera universitaria”

Macarena Pérez jamás pensó que podría vivir del BMX freestyle, la gran pasión que tenía desde pequeña. Ella veía que en ese deporte sólo había futuro para los hombres. Sin embargo, el panorama ha ido cambiando con el paso de los años y hoy la chilena ya es una exponente de la disciplina, estando 7° en el ranking mundial.

La subcampeona del mundo en dos oportunidades y deportista de Vans, recibió una gran noticia en las ultimas semanas: X Games, el famoso mega evento de deportes extremos, la invitó a participar de la edición que se desarrollará en Ventura, Estados Unidos, entre el 28 y el 30 de junio.

Se trata de un hecho histórico, ya que será la primera vez que habrá presencia femenina en una competencia de BMX en los X Games. Este evento, por cierto, comenzó a realizarse en 1995... Es decir, casi tres décadas después, las mujeres tendrán un espacio exclusivo para demostrar su talento sobre la bicicleta.

En ese contexto, ‘Maca’ Pérez charló con AS desde Estados Unidos, donde reside desde el 2018. “Estoy emocionada y feliz de tener esta opción para hacer historia en X Games”, señaló la deportista de Vans, de 27 años.

- ¿Cómo reaccionó cuando le dijeron que participaría en X Games?

- Al principio estaban preguntando si es que participaríamos (las mujeres), pero todas dijeron que sí, a pesar de que sea un mes antes de los Juegos Olímpicos. Era una oportunidad increíble y como que no le di mucha importancia a esa pregunta... Todas nos sorprendimos, porque solamente invitaron a seis mujeres de todo el mundo. Ser una de ellas me hace sentir súper honrada, emocionada y feliz.

- A propósito de que sólo van seis mujeres, ¿se siente una referente a nivel global en su disciplina?

- Se podría decir que sí, espero que sí. Siento que yo he estado desde el principio... También empecé a contar con el apoyo de Vans y ahí me hicieron conocida a nivel mundial. Entonces, creo que sí.

- Imagino que usted, cuando era pequeña, veía los X Games. Ahora estará ahí y cumplirá un sueño, ¿no?

- Bueno, cuando yo partí andando en bici, no había nadie que me dijera ‘hay que entrenar y mirar hacia el futuro’, porque no existía un futuro para las mujeres. Entonces, claro, yo decía ‘ojalá algún un día llegar a X Games’, pero como nunca veía mujeres, era un sueño que no veía posible.

- Entiendo que usted estuvo en los X Games del 2018, haciendo una ‘demo’...

- Sí... Antes, en X Games hacían unas demostraciones con mujeres. No había mucha cobertura, ni nos daban mucha importancia, pero igual yo decía ‘sería bacán ir a una demo’. Y bueno, en el 2018 me invitaron y estuvo muy bueno. Después, en el 2019 nos invitaron de nuevo a ser parte de una demo, pero como que todas lo conversamos y encontramos súper injusto que solamente nos dieran una demo, así que le dijimos que no a X Games, hasta que nos dieran una categoría. Fue como un boicot.

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- ¿Y ahora qué espera de su participación ahí?

- Espero dar lo mejor de mí y disfrutar. Es algo muy diferente a lo que es competencia de los Juegos Olímpicos o de la UCI (Unión Ciclista Internacional)... Es un parque totalmente diferente y siento que da más para hacer estilo, que trucos fuertes. Ojalá pueda hacer una mezcla de los dos y llevarme una medalla.

- La cambio de tema y la llevo a los Juegos Olímpicos de París. ¿Sigue con chances de ir?

Estoy en proceso de clasificación, así que todavía hay una chance. Tenemos dos campeonatos ahora, uno en mayo y el otro en junio, y después de eso, según los resultados de la clasificación olímpica, se va a saber.

- ¿Cómo definiría su carrera en el BMX?

- Me ha sorprendido mucho cómo se han ido dando las cosas. Como decía, yo no esperaba vivir del BMX, ya que no existía un futuro para las mujeres. Después de terminar el cuarto medio, yo empecé a viajar, como haciendo el típico año sabático, y luego se empezaron a abrir puertas y aparecieron los auspiciadores. Vans me ayudó mucho, mi mamá también, y después aparecieron otras marcas. Así, todo se fue dando... Pasé de no tener nada y no ser nadie en el BMX, a vivir del BMX. Ha sido una locura. Estoy agradecida de todas las oportunidades que he tenido.

- Emocionante, ¿no?

- Sí, de todas maneras. He podido viajar por todo el mundo, tengo amigos de todo el mundo, y ahora llevo mi carrera en Estados Unidos. La parte difícil es extrañar a la familia y a los amigos, pero me siento súper independiente y feliz de poder estar haciendo esto a mis 27 años y sin tener una carrera universitaria.

- En su disciplina, por cierto, están muy propensos a sufrir lesiones. ¿Qué es lo más complicado que le ha tocado pasar?

- Sí. Bueno, de repente he tenido caídas donde termino golpeada y adolorida, pero sin lesiones. Yo creo que las lesiones más fuertes han sido cuando me he golpeado en la cabeza. Nosotras andamos con casco, pero a veces el golpe es tan fuerte, que nos quedan contusiones. He quedado inconsciente, me he quebrado la clavícula tres veces y he tenido distintas operaciones: en las rodillas, en las manos, en los pies...

- Las caídas, entonces, tienen que ser perfectas...

- Sí, porque si fallamos en algo, eso nos puede mandar fuerte al piso. Hay varias disciplinas del BMX y en la nuestra estamos a tres metros de altura.

- ¿Hay miedo a arriesgar la vida?

- Sí, el miedo siempre está. Yo creo que el miedo nos limita mucho para progresar, porque nosotros, cuando practicamos, saltamos sobre una cama de espuma, que se llama foam pit. Ahí intentamos todos los trucos nuevos y de repente salen perfectos, pero cuando uno ya los hace en la rampa, entra el miedo.

- ¿Qué sueño les quedan por cumplir en el BMX?

- Mi sueño es seguir progresando y seguir haciendo trucos nuevos. Este año, mis meta son los X Games y los Juegos Olímpicos. Ojalá pueda lograr una medalla en ambos... Y después la idea es mantenerme en el top mundial y seguir viviendo de esto. También me gustaría hacer proyectos con fotos, videos, y ponerme un poco más creativa en lo artístico, más que entrenar tanto.

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