Se retiró en Colo Colo a los 22 años y hoy empieza su nueva vida: “Estoy mucho más tranquila”

El pasado 19 de febrero, Antonia Alarcón (22) anunció una decisión que ya tenía tomada desde diciembre de 2023: su retiro del fútbol. Producto de una lesión en la rodilla, la joven jugadora de Colo Colo determinó dejar el fútbol profesional, luego de meditar durante un año la opción. Fueron meses muy duros que hoy, mucho mejor anímicamente, recuerda en entrevista con AS Chile. “La verdad es que estoy mucho más tranquila”.

“El último año no lo pasé muy bien en el fútbol por el tema de mi lesión. Me costó mucho volver a entrenar y hacer lo que hacía antes. No lo pasé mal por temas del club o de compañeros, al contrario. Fue un tema mío. Sentía que estaba estancada, no avanzaba, entonces no me sentía con las mismas condiciones con mi rodilla para ser competitiva, estar a la altura del profesionalismo. Mi lesión me estaba sobrepasando”, añade.

- ¿Mentalmente?

- Mental y físicamente. O sea, había muchas cosas que antes eran muy simples para mí, como acelerar, correr que era mi fuerte, enganches, que ahora mi rodilla no me permitía hacerlos. Siempre la tenía muy hinchada, había días en los que me levantaba y me dolía hasta el caminar. Y mentalmente me sentía muy lejos del nivel de antes.

- ¿Cómo atravesó ese proceso? ¿Pidió ayuda?

- En el club me apoyaron harto. Estuve con psicólogo, psiquiatra, mi familia me apoyó día a día y eran los que realmente sabían cómo lo estaba pasando. Estuve bien rodeada.

- ¿Cuánto meditó la decisión?

- Obviamente no fue de una día para otro. Fue una decisión que estuve meditando durante el año. Por otro lado, tengo mi carrera, pasé a cuarto año de Ingeniería Comercial y para mí siempre ha sido muy importante, pero sentía que no estaba rindiendo en ninguno de los dos lados al cien por ciento. Estaba a medias y eso era lo que no me dejaba tranquila. Me costó un montón tomar la decisión, porque siempre ha sido mi sueño jugar fútbol profesional, sobre todo en Colo Colo. Tenía millones de proyectos con el fútbol, pero no estaba tranquila y sentí que era lo mejor para mí seguir con mi carrera universitaria y seguir ligada al deporte desde otro lado.

- ¿Desde cuál?

- A mí me gusta mucho el marketing deportivo y es ahí donde me quiero especializar, para más adelante dedicarme a eso. Es una de mis grandes metas.

- ¿Y cuándo tomó la decisión de forma definitiva?

- Esto lo tengo decidido decidido desde diciembre, pero tenía que esperar algunas cosas. Había mucha gente que no sabía nada y me preguntaba, por lo que decidí que lo mejor era hacer un comunicado para anunciarlo.

- ¿Cómo se lo tomaron sus cercanos?

- Venía conversando mucho con ellos y al principio yo misma me alentaba a seguir y ellos me apoyaban y también me respaldaron cuando decidí no seguir. Siempre he tenido esa contención de ellos y mi pololo.

- ¿La lesión la ha complicado en su vida normal?

- No, ya puedo hacer mis cosas, puedo caminar bien, hacer ejercicio, trotar, pero jugar fútbol profesional es otra cosa.

- En su publicación indica que quiere pausar su carrera futbolística. ¿Eso deja la puerta abierta para volver a futuro?

- No le cierro las puertas a nada, porque uno nunca sabe lo que puede pasar. Si más adelante me dan ganas y me siento mejor, pero tampoco es que va a pasar. Solo es dejar la puerta abierta.

- ¿Qué es lo que más va a extrañar de su vida como futbolista?

- Pucha, todo (ríe). El camarín, mis compañeras, el día a día y lo que se vive con ellas, la emoción antes de los partidos. Son millones de cosas, pero es un proceso. De que lo voy a extrañar, eso será siempre (ríe).

- ¿Cuáles fueron los momentos que hoy recuerda con mayor cariño?

- Los Sudamericanos son bonitos, entrenar con la Roja adulta y sus figuras, la Noche Alba que jugué contra Boca en la que fue mucha gente, que fue televisada. Eso fue súper novedoso para mí, porque antes yo jugaba en una cancha con mis familiares y llegué a Colo Colo y me presentaron en un estadio junto a mis compañeras y había mucha gente. Son cosas que me quedaron marcadas.

- En el tiempo que jugó, ¿vio una gran evolución del fútbol femenino en Chile?

- Totalmente. Yo partí jugando en Fernández Vial donde nos teníamos que pagar los viajes, que era mi familia la que me ayudaba. Después en Universidad de Concepción nos iban cambiando de cancha, hasta que llegué a Colo Colo y todo era distinto. Todas teníamos contrato, un lugar fijo para entrenar, nos hicieron un camarín para nosotros, a los estadios va mucha gente... entonces el avance ha sido muy lindo. Las finales a estadio lleno, que me tocó ver desde afuera por la lesión, fueron muy bonitas porque recuerdas todos los sacrificios grupales que se hicieron para llegar ahí.

Una foto viral en Colo Colo y las mejores amigas que le dejó el fútbol

- Hay una foto viral suya junto a Isidora Olave, Maximiliano Falcón y Pablo Solari vestidos como pilotos de Fórmula 1. ¿Cómo recuerda ese momento?

- (Ríe) ¡Sí! Esa fue una actividad que hicieron en el club y nos llevaron a todos. Había muchos juegos y compartimos mucho entre ambos planteles. Lo pasamos muy bien.

- ¿Y en el día a día en el club había una conexión entre ambos planteles?

- Había conversaciones de vez en cuando, hicimos algunos entrenamientos en conjunto y todo fue súper bien. De hecho, Wilson Ferrada, que es el kinesiólogo del plantel masculino, me llevó a hacer la recuperación con ellos, y siempre fueron muy amables y acogedores. No había ninguna diferencia.

- ¿Cuáles mejores amigas que le dejó el fútbol?

- ¡Ufff! ¡Muchas! Llanka Groff que juega en la U. La conocí de chica cuando llegamos a la Selección, nos quedábamos juntas, conozco a su familia, ella es como una familia para mí. En Colo Colo, la ‘Chichi’ (Isidora Olave), Michelle (Olivares), Yastin (Jiménez), Elisa Durán, con quien viví dos años en su casa. Su familia me acogió de una manera increíble. Quizás se me vayan muchas más, pero de las que me acuerdo, son ellas.