ADN RadioConcierto Radio
NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

ENTREVISTA AS

Su vida ha estado ligada al deporte y hoy la rompe en Instagram: “Canaliza mi energía”

La periodista Aien Wilenmann suma más de 70 mil seguidores en la red social. “A veces modelo, a veces deportista”, dice su biografía.

Actualizado a
Su vida ha estado ligada al deporte y hoy la rompe en Instagram: “Canaliza mi energía”

Como ocurrió con la gran mayoría de las personas, la pandemia significó un cambio en la vida de Aien Wilenmann (24). La joven periodista se confiesa “muy proactiva… quizás un poco hiperactiva”, en diálogo con As. Por lo mismo, la cuarentena que originó el Coronavirus hace ya dos años la afectó de tal forma que se vio impulsada a cambiar de hábitos.

“Comencé a entrenar de manera más aplicada en el peak de la pandemia, cuando estábamos en el máximo encierro. Yo vivo en departamento, entonces el tema me pegó mucho más fuerte. Ahí fue donde me hice la costumbre de entrenar”, revela. Hoy exhibe sus idas al gimnasio y sus rutinas en Instagram (@aienwilenmann), red social donde acumula más de 70 mil seguidores.

Su popularidad en aquella plataforma, incluso, le ha imposibilitado encontrar el tiempo en la actualidad para ejercer su profesión, debido a los distintos compromisos con las marcas que apoyan su contenido: “Quiero volver a hacer periodismo, pero lo he peloteado por los horarios. Hace poco estuve en Mega. Hice la práctica ahí y luego continué cerca de ocho meses, pero estaba en mi período de entrega del examen de título, entonces no me daba el tiempo”.

- En cuanto al deporte, ¿cómo es su rutina?

- Siempre intento ir en la mañana al gimnasio. Soy una persona con mucha energía. En las tardes tampoco tengo tiempo, porque trabajo con marcas, con gimnasios, tengo sesiones de fotos o eventos que ahora se están retomando.

- ¿Cuándo comenzó su gusto por el deporte?

- Ha sido de toda la vida. Desde que tengo memoria he practicado deportes. Mi papá es profesor de Educación Física y mi mamá hacía taekwondo, así que también estuvo ligada. En un minuto, yo quise estudiar algo relacionado al deporte, pero mi papá me dijo que me convenía más hacer cursos después. Fue algo que consideré mucho. Él también administraba un gimnasio. Por mi parte, comencé a los cuatro años a practicar natación, hasta los 12. Luego retomé en la universidad. También hice vóleibol, básquetbol. A los siete años recuerdo que entré también a jugar fútbol en unas inferiores de Colo Colo, porque mi papá trabajó ahí. Luego en tercero medio comencé a hacer atletismo y entrené un tiempo en la pista atlética del Estadio Nacional. Siempre me ha gustado explorar todos los deportes.

“Uno de los aspectos más interesantes del deporte es que te permite compartir con gente de distintas culturas y de diferentes estratos sociales”

Aien Wilenmann

- ¿En qué ámbitos la ha ayudado el deporte?

- Yo nunca lo hice buscando un fin estético, sino que era para canalizar la energía que tenía. Además, en el mismo gimnasio se nota quienes han practicado deportes colectivos, porque eso te ayuda a entrenar en comunidad. Hay gente que no sabe. Y la influencia de mi papá es importante, porque creo que él me inculcó eso para que yo fuese más despierta y porque uno de los aspectos más interesantes del deporte es que te permite compartir con gente de distintas culturas y de diferentes estratos sociales. También me gusta sentirme fuerte. Este año, por ejemplo, me fui con mi pareja a Cancún y allá lamentablemente otros chilenos nos asaltaron. Los funé por redes sociales. El tema es que a mí me golpearon entre muchas personas, me arrastraron, aún tengo cicatrices debido a eso, pero no me lograron quitar nada. Cuando le conté a mi mamá por videollamada me dijo “no puedo creer que no hayan logrado quitarte el banano”. Obviamente, remarco que el consejo jamás va a ser ponerse a pelear con los asaltantes. Pero en esa ocasión puntual sí corroboré lo fuerte que puedo ser y en eso me ha ayudado el deporte.

- ¿Es satisfactorio recibir comentarios de que lo está haciendo bien o que motiva al resto a seguir un estilo de vida saludable?

- Sí, para mí es bacán cuando me llegan mensajes así. Pero es más bacán cuando gente cercana lo hace. Yo tengo una amiga que siempre me decía “no sé cómo se te da ir al gimnasio, yo no podría”. Yo le dije que de a poco, que tenía un código de descuento para tal gimnasio y le fui metiendo el bichito. Ella se veía muy reacia a la vida fitness, y se metió y ahora entrena y está muy motivada. Dejó de lado la vida de carrete. Que sea gente que no te conozca también es bacán, trato de responder siempre. Es señal de que algo estoy haciendo bien.

- ¿Qué consejo podría darle a alguna persona que quiere comenzar a incluir el deporte en su día a día?

- Lo más importante que hay que hacer es llevar las rutinas a tu realidad, a lo que estudias, a los tiempos que tienes. En redes sociales siempre se muestra lo bonito, cuando estás motivada, cuando la ropa te combina (sonríe), pero hay días en que no es así, hay factores externos que te afectan y no vas con la misma motivación. Quizás tienes frío, tienes lata, te dormiste tarde estudiando. Yo a veces entro al gimnasio apagada y salgo como un foco led, puedo soportar cualquier cosa que me pase en el día. Está bien, por ejemplo, buscar motivación en otras cuentas de Instagram, pero hay que buscar la mejor versión de uno y no compararse. Esa frase cliché es muy cierta. No hay que desanimarse al principio tampoco, porque todo cuesta. Se trata de constancia.