1x1 de Chile: Catalán y Paulo Díaz marcaron la diferencia en un equipo que batalló poco

Gabriel Arias. Demostró que es un muy buen atajador y que la clave es que se sienta con confianza. En el primer tiempo le sacó un cabezazo de gol a Nicolás González y en la segunda fracción salvó dos mano a mano, el último a Garnacho.

Mauricio Isla. Por primera vez fue capitán de la selección chilena y en la cancha demostró toda su experiencia. Un pase largo perfecto suyo terminó en el cabezazo en el palo de Catalán. A los 75′ tuvo una entrada destapado por la derecha, pero se apresuró y malogró la oportunidad.

Matías Catalán. El mejor de Chile en la cancha del Monumental de River. Fue el que estuvo más cerca de anotar. con el cabezazo que dio en el palo sobre el final de la primera fracción.

Paulo Díaz. Uno de los mejores en la Roja, junto a Matías Catalán. Ambos forman una dupla central que puede ser por varios años la titular en la Selección. La crítica que se le puede hacer es que a veces es demasiado ambicioso y hace cosas casi imposibles, como cambios de lado o pases profundo, que muy pocas van a resultar.

Thomas Galdames. Buen partido, aunque fue de más a menos. No es fácil disputar el primer encuentro como titular ante Argentina en Buenos Aires.

Felipe Loyola. Claramente Gareca no lo mandó a la cancha para atacar. Y se entiende por la naturaleza del partido. Su primer descuelgue ofensivo fue un centro en el minuto 38.

Rodrigo Echeverría. Tuvo que trabajar el doble, porque Marcelino Núñez lo ayudó muy poco en la contención. Independiente de esto, estuvo bajo y para ejemplo un número: sólo ganó uno de los cinco duelos que tuvo en el mediocampo. Gareca lo reemplazó por Claudio Baeza a los 72′.

Marcelino Núñez. El más débil del equipo chileno. No sintió el partido y Ricardo Gareca constantemente le pidió algo más. Fue el primer amonestado de la Roja y en general tomó malas decisiones.

Darío Osorio. En el fútbol moderno, el talentoso se pierde cuando el partido le pide marcar mucho. Y eso pasa con Osorio. Le costó ante Argentina, pero siempre puede entregar claridad con su técnica. Aunque ha crecido mucho en Dinamarca, se le vio muy liviano en la batalla con los campeones del mundo. Perdió 14 balones.

Eduardo Vargas. No es exagerado decir que en sus diez primeras intervenciones tuvo errores. Pelotas perdidas, pases al rival y algunos de ellos hasta en zona peligrosa. En ofensiva, correteó y tuvo una contra a los 26′ y luego se inventó un córner sobre el final. No fue su noche.

Víctor Dávila. En ofensiva siempre es un aporte, de hecho, un pase suyo casi termina en gol de Vargas. Además, es el primero en presionar para recuperar balones. Eso sí, su excesivo ímpetu le pasó la cuenta y una amarilla obligó a que Gareca lo sacara antes de tiempo.

Carlos Palacios. Fue el que mejor jugó de los que ingresaron en el segundo tiempo. Algo mejoró Chile con la figura de Colo Colo, pero no fue suficiente. También entraron, sin destacar demasiado, Williams Alarcón, Claudio Baeza, Eugenio Mena y Ben Brereton Díaz.

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