“Acá en Chile los sueldos están al día, eso es algo que parece joda, pero que en Uruguay no pasa”
Cristian Muga cumple ya su tercera temporada en Chile, luego de fichar en Cobreloa desde Santiago Morning. Es una de las figuras de la B: “Uno siempre apuesta a mejorar”.


En poco más de dos temporadas, Cristian Muga se convirtió en una figura siempre presente del Ascenso. A fines de 2024, el uruguayo fichó en Cobreloa, tras llegar a Santiago Morning en 2023, en otro paso importante de su carrera. Hoy, es un mediocampista importante del elenco que dirige César Bravo y, para AS, el charrúa hizo un repaso de sus años en Chile y de cómo partió su carrera en Uruguay.
“Me inicié en las formativas de River Plate, allá en Uruguay. Después, en lo que sería Proyección (categoría Sub 21) acá en Chile pasé a Liverpool y salté a jugar en Primera División. Después, fui a la División C de Uruguay, que sería como la Segunda Profesional de acá de Chile”, contó Muga, de 29 años.
- Después llegó a Argentina. ¿Cómo fue eso?
- Me fui muy joven y llegué a una ciudad bien en el sur. Lo tomo con un período de aprendizaje, más allá del rol de jugador. Me ayudó a madurar mucho y en muchos aspectos. Después, volví al mismo club en Uruguay y me tocó ascender. Estuve un año en la B de allá y después pasé a Rampla Juniors, que es un club con historia en Uruguay, pero que también estaba en la B en ese momento. Ahí pudimos pelear el ascenso a Primera, pero no se nos dio.
- ¿En esa etapa en Argentina, le tocó jugar en el Nacional B, que es la segunda categoría local? Es un torneo muy exigente y duro.
- Sí, claro jugábamos el Nacional B. La ciudad estaba bien el sur y eran muchas horas de viaje en bus. Fueron meses intensos y de mucho aprendizaje. Era una categoría muy física, muy dura y con la pasión que los caracteriza a ellos.
- Desde Rampla Juniors finalmente llegó a Santiago Morning. ¿Qué le pareció la posibilidad cuando surgió?
- Venía ya de dos años en la B de Uruguay y además, por un tema de edad, creía conveniente dar el salto de salir del país. Surgió la posibilidad y calzó justo. Me vino bien en el momento y después me permitió seguir creciendo para llegar a Cobreloa.
- ¿Con qué se encontró en el Ascenso de Chile?
- Me encontré con un fútbol profesional, en infraestructura, en los campos de entrenamiento, en los mismos clubes. Acá los sueldos están al día, que eso es algo que parece joda, pero que en Uruguay no pasa. Uno se encuentra con un montón de ventajas que lamentablemente en Uruguay estamos lejos. Pero creo que eso va forjando al futbolista uruguayo, lo hace tener hambre. Crece y se forma en un fútbol pobre y, cuando llega a Primera, lo primero que quiere es salir para mejorar su calidad de vida.
- ¿Y en el fútbol mismo, qué encontró diferente?
- Hay una diferencia física. Me parece que acá se trabaja más en lo físico. Los uruguayos somos más aguerridos a la hora de defender, me encontré acá con jugadores de muy buena técnica acá en Chile. Seguramente, en Uruguay también están, pero por el tema de las canchas no se ven tanto. Las condiciones de las canchas no lo permiten y también el estilo de juego. Esto hace que todo sea un poco más friccionado.
- ¿No hay equipos que se salgan un poco del estilo clásico del fútbol uruguayo?
- Sí, sobre todo los técnicos más jóvenes que vienen con algunas ideas nuevas. Quizás, tienen otra formación y también otra información. Obviamente, el fútbol fue cambiando y Uruguay no está mucho al margen de esto. Si uno analiza a los jugadores de la selección (de Uruguay) de hace 15 años atrás con los de ahora, se ven características distintas.
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- ¿Cuáles son sus expectativas en Chile ahora que llegó a Cobreloa?
- Uno siempre apuesta a mejorar desde todo punto de vista. Hoy, tengo contrato con Cobreloa, que es un club en el que me siento muy cómodo. Es obvio que uno siempre quiere dar un paso más, a más cosas, más desafíos. Puede ser en Cobreloa o en otro sitio, es un tema abierto. Estamos trabajando para apuntar a eso.

