Entrevista AS
El ‘chileno’ que podría jugar por Irak: “No he hablado con nadie de la Roja”
Hoy vive su mejor etapa tras llegar desde Suecia a la liga de Noruega: “Celebramos los títulos de la Copa América con mi mamá y mis hermanos”, cuenta.
Danilo Al Saed Alvarado nació en Estocolmo en 1999, posee nacionalidad sueca, su madre es chilena y el padre es de Irak. Recientemente, completó la temporada del estreno en la primera división de Noruega, actuando por Sandefjord, luego se surgir en Sandvikens, cuadro de la tercera categoría de Suecia. Hoy, se alista para el segundo año en el torneo escandinavo y conversó con AS desde Europa para abordar el vínculo que tiene con Chile. Algunas informaciones aseguran que podría actuar por la selección iraquí.
“Me gusta estar aquí, en Sandefjord, me gusta el equipo, el entrenador, mis amigos. Es una etapa muy buena, es estar como en Suecia. Lo he hecho bien, hice seis goles y también tengo una asistencia. Es recién mi primer año como profesional, porque antes solo jugué en la tercera división de Suecia. Me encanta acá, me gusta, entrenan mucho, todo el día”, sostuvo Al Saed Alvarado.
- ¿Fue muy grande el cambio?
- Sí, por supuesto, muy grande. En Suecia se juega muy despacio, aquí se corre mucho. Acá es un fútbol mucho más intenso. Tengo contrato por dos años más, la experiencia para mí ha sido buena, pero hemos estado un poco atrás en el campeonato.
- ¿Cómo se inició en el fútbol sueco?
- Yo jugué en el Sandvikens, de tercera división. Ningún equipo de las divisiones mayores me quería allá y apareció la posibilidad de llegar a Noruega, porque acá sí me querían. Acepté inmediatamente, porque el fútbol es mi vida, es un sueño desde que era chico.
- ¿Ha tenido algún contacto con gente de la Selección chilena?
- No, no he hablado con nadie de la Roja. Sería importante para mi carrera futbolística si se diera alguna posibilidad. De Irak sí me hablaron, ellos quieren mis papeles. Estoy pensando qué puede ser mejor para mi carrera. Ahora solo tengo la nacionalidad sueca, no sé cómo se pueden conseguir las otras, pero las puedo conseguir. Cuando era más chico, estuve en unos entrenamientos con las selecciones más chicas de Suecia.
- ¿Sigue los futbolistas chilenos del extranjero?
- Sí, me gusta mucho Alexis Sánchez. Lo he seguido todo el tiempo, en el Arsenal, en Udinese. También cuando estuvo en el Barcelona, en Manchester y por supuesto que también en la Selección, en el Mundial y en las Copas América.
- ¿Está entre sus recuerdos las dos finales ganadas a Argentina en las Copas América de la década pasada?
- Sí, por supuesto. Las celebramos mucho con mi mamá, mis hermanos y también mis amigos. Yo también vi a Chile cuando estuvieron acá en Europa, en 2018, contra Suecia. Fui al estadio a ver el partido con mis hermanas.
- ¿Le gustaría volver a Suecia? A lo mejor ahora pueda tener alguna posibilidad en algún club más grande.
- Hubo algún interés en la primera división de Suecia, pero ahora no sé. Es mejor esperar un poco, estoy muy feliz acá. Lo único que quiero es jugar acá y uno no sabe lo que pueda pasar más adelante. El fútbol puede ir cambiando mucho.
- Usted nació en Estocolmo. ¿En todos estos años ha tenido alguna relación directa con Chile?
- Sí, fue una vez, cuando fui a Chile. Solo una vez vez fui, porque no podía ir tanto. Mi mamá siempre ha ido al país, pero yo no podía ir también porque estaba con el tema del fútbol. No podía estar tres o cuatro semanas por allá, tenía que entrenar acá.
- ¿Tiene familiares acá en Chile?
- Sí, están mis tías y mi mamá tiene a sus sobrinos allá. Ellos viven en Limache, de ahí es mi mamá, ella vive en Estocolmo. Me gustaría ir de nuevo a Chile. Mi mamá quiere que vayamos todos, mis hermanas y mis hermanos también. A Irak no he ido.
- ¿Compartió en Suecia con otros hijos o descendientes de chilenos?
- Sí, con muchos. En el colegio, mis amigos eran hijos de chilenos, de Valparaíso. Uno de mis mejores amigos, Kevin, también viene de Chile. Yo jugué con él en el Sandvikens de la tercera división de allá.
- Logra comunicarse correctamente en español. ¿Aprendió con su madre? ¿Ella le enseñaba?
- Sí, claro, pero cuando era pequeño yo no quería hablar español, porque solamente quería hablar en sueco. Mi español no es tan malo, pero entiendo más cuando me hablan. No puedo hablar bien, bien, me cuesta. Hablo como un gringo (ríe).