Entrevista AS
“No te preocupes”: la increíble anécdota con Romario del chileno que jugó en Vasco
Alcanzó a estar unos meses en el nuevo club de Gary Medel y compartió con la leyenda de la selección brasileña: “Me decía ‘gringo, tú vienes de Chile’”.
Claudio ‘Cuchara’ Salinas es recordado por su aparición en Everton y una rápida llegada a Colo Colo a fines de los años 90, pero el ex zaguero también atesora un importante recuerdo futbolístico. En 2006, llegó a Vasco da Gama, cuadro que vuelve a estar en la atención de los chilenos a raíz de la incorporación de Gary Medel. La estadía se prolongó sólo algunos meses, aunque sí tuvo la chance de compartir camarín ni más ni menos con Romario, una de las grandes figuras del Scratch.
“Recuerdo que llegué el día 22 de febrero. Era el tiempo del carnaval y todos me recibieron súper bien. El club tenía unos problemas económicos grandes y no me pudo fichar a mí por un tiempo. En ese momento, llegó (el ex volante nacional) Frank Lobos por otro lado también. Estuvimos unos meses esperando para que se pudiera arreglar el problema”, recordó a AS el también ex central de Santiago Wanderers, La Calera y San Luis, entre otros clubes.
“El club tenía todo bloqueado con los extranjeros, no teníamos derecho a la visa, nada. Era un club grande, hermoso, con mucha hinchada y ahí conocí a Romario. Estaba cerca de hacer los 1.000 goles y a él le debían mucho dinero y llegaba solamente a entrenar en helicóptero, con sus guardias. Tuve la posibilidad de conocerlo ahí. Me decía ‘gringo, tú vienes de Chile’, porque a los extranjeros les dicen así en Brasil. Él jugaba solamente los fines de semana. Iba a cumplir 40 años y estaba marcado entero, era increíble”, añadió Salinas.
- ¿Tuvo la oportunidad de conversar diariamente con él?
- Sí, y me pasó una anécdota muy buena. Siempre entrenábamos en Sao Januario, en el estadio (en Río de Janeiro), y ahí también tenían para concentrarse, pero a veces íbamos a un complejo grande que tenían en otro lugar. Recuerdo que llegué a entrenar y le había ocupado el lugar a Romario y no tenía idea que su puesto era el de al lado. El utilero me dijo que él usaba dos puestos y que lo estaba ocupando (ríe). Justo venía llegando y me dijo ‘no te preocupes’ y empezamos a conversar un poco de la Selección.
- ¿Pudo jugar al menos algunos partidos amistosos con Romario o no?
- Sí, jugué todos los amistosos, pero no nos pudieron fichar (con Lobos) porque el club tenía todo bloqueado. Antes había estado ahí también Adán Vergara (ex central chileno) y se había ido. A mí me llevó Toninho, yo lo conocí porque él había pasado por Colo Colo. Me dijo que estaba todo bien y después tuvimos todos esos problemas. Al final, hice una demanda contra el club.
- ¿Al momento de firmar se preocupó de que el contrato estuviera en regla?
- Sí, por supuesto. El contrato era por un año y con opción de compra, yo había firmado todo en orden. Me pagaron dos meses, después no me pagaron más y me dijeron que tenía que irme. El abogado de la demanda fue Eduardo Carlezzo, el mismo de la ANFP contra Ecuador en las Eliminatorias pasadas, ahí yo lo conocí, pero me fue mal. Un año después el fallo fue que yo tenía que pagarle al club, me quería morir (ríe).