De la Juventus a Audax: “Algunos técnicos corrigen con dureza a los jóvenes; los bajonean”

Vincenzo Gianneo (36) ingresa a la reunión de Zoom con AS y rápidamente sonríe. Su nuevo desafío en el fútbol, que lo vive concretamente en Chile, lo tiene entusiasmado: hace algunas semanas fue presentado como el nuevo supervisor del Fútbol Joven de Audax Italiano. “Me siento bastante bien”, afirma el entrenador, cuya trayectoria contempla, por ejemplo, pasos por dos academias de la Juventus. Una en Perú y otra en Argentina. “Fue interesante estar adentro del proyecto y poder desarrollar cosas que se hacen en Turín. Me hizo crecer como profesional”, relata al respecto.

A. Italiano

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- ¿Con qué curriculum llega al Audax Italiano?

- He trabajado como entrenador en Ferro, en los proyectos Juventus Academy y en Croacia, en el NK Funtana. Fui futbolista, jugué profesionalmente en la Serie C y la D en Italia, y después estuve tres años en la Primera División de Perú. También trabajé en la escuela de Menotti. Vengo por intermedio de la nueva propiedad del club.

- ¿Qué le genera este reto en Chile?

- Me siento bastante bien. Audax es fundado por italianos y es un equipo que siempre ha sido orientado al trabajo, a la lucha. Me encontré con un buen club, bastante renovado en Primera División, estructurado, y la formativa es bastante competitiva. Sobre todo, en las categorías más bajas, de la Sub 11 a la 14. Vamos bastante bien, he visto cosas interesantes. Inclusive, en la Sub 14 tenemos chicos seleccionados. Y a las categorías grandes también las vi bien. Hay que mejorar algunas cosas, sí, como orientar a los chicos a que trabajen de una manera direccionada al profesionalismo. Pero vi bastante bien al club, ordenado. Me dio una buena impresión.

- ¿Cuál será, en específico, su tarea en Audax?

- Tengo que ver cómo trabajan las divisiones inferiores, porque el interés de la nueva propiedad es ese: el poder abastecer al primer equipo con los chicos de la cantera. Audax era de los equipos que sacaba bastantes jugadores, pero hace seis o cinco años no ocurre eso, y quieren retomar esa idea. Yo he venido para ver por qué no está sucediendo eso, porque ellos (los dirigentes), cuando compraron la propiedad, no es que les dijeron ‘en las inferiores hay esto, esto y esto’. No, no saben. Están a ciegas. Entonces, tenían que ver qué había debajo de la alfombra para ver qué hacer.

- ¿Por cuánto tiempo viene?

- Por todo el año. Ya le di un informe a la nueva propiedad de cómo se estaba trabajando y lo que se tenía que hacer

- ¿Y qué sacó en limpio de ese informe? ¿Qué cosas le causaron preocupación?

- Estoy evaluando mucho. Después dependerá de la capacidad, de lo que los entrenadores les están dando a los chicos, qué les están corrigiendo o qué valor futbolístico le están entregando. No de irse a limpiar la mano para ir a la mesa, sino de qué estructura de organización tienen a nivel de progresión didáctica.

- ¿A qué se refiere?

- La propuesta que hay es muy prudente, y tú no tienes que agrandar el proceso en determinada categoría, sino que achicarlo. Hay determinadas categorías que tienen que trabajar en una forma, y otras en otra. Digamos que hay pros y contras.

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- ¿Qué le parece que el Fútbol Joven haya estado paralizado casi dos años?

- Eso complicó mucho el proceso del joven futbolista en los aspectos técnicos y físicos. Y en determinadas categorías, también en lo formativo-competitivo. Prácticamente no jugaron, ni tuvieron la continuidad que se necesita en este proceso. Ahora, claramente la solución está en nuestra responsabilidad como formadores. Hay que planificar y organizar prudentemente el regreso progresivo a la cancha, porque el cambio puede ser brusco en los chicos sujetos a lesiones. Hay que ser criterios en achicar los procesos, ya que el Fútbol Joven sufrió en estos últimos dos años.

- Siempre se ha dicho que, en términos psicológicos, el jugador chileno es un poco débil. Puede tener el talento, pero en algún momento se cae y le cuesta reponerse. ¿Cómo se puede fortalecer ese aspecto en la etapa formativa?

- No te hago una contra pregunta, pero sí una reflexión antes de responderte. Una vez me dijeron ‘¿a qué edad detectas que un chico sea crack?’ Para eso no hay una fórmula mágica, a no ser que sea Messi, que va para adelante. Tal vez después se pudo haber perdido. Te puedo dar muchos ejemplos. Incluso el de un chico que tuve en Croacia, que sigue estando como jugador y capitán de su Selección, la Sub 17, y que juega en Salzburgo. Él firmó un contrato de seis años, pero a los 17-18-19 años no se sabe si se va a perder o no... Yo creo que el futbolista chileno tenga talento. Seguramente no hay que estancar ese talento, sino que elevarlo. Depende mucho de la tarea que tiene un formador. Te recuerdo que la única forma para que un chico pueda crecer es añadiéndole valor futbolístico. Él se rinde solamente ante el conocimiento. A través de eso eres creíble. ¿Contesté tu pregunta?

- Me quedó dando vuelta el tema psicológico...

- Es algo más para hablarlo con un psicólogo. Probablemente, lo que uno puede hacer en esa etapa es solamente motivarlo, darle la oportunidad de hacer las cosas, de atreverse, y no bajonearlo a la primera, porque en muchos partidos del Fútbol Joven he visto que (los entrenadores) no corrigen sobre el error, sino que corrigen con la dureza. Eso está bien, pero se tiene que ser firme dentro del error. El formador tiene que dar motivación. Y si no sale una, hay que seguir insistiendo y animando.

- ¿Qué opina sobre el nivel de los formados en casa que están en el primer equipo de Audax?

- Muy bien. Tal vez están para un nivel superior. Se tienen que afirmar. Bryan Figueroa es un volante buenísimo. El lateral, el ‘4′ (Nicolás Fernández), me encanta. Significa que hay material, y yo lo he visto. Me parece interesante poder elevar eso y que esto suceda con más frecuencia. Hay un factor importante.

- ¿Cuál?

- La captación. Si tú tienes un factor de captación alto, de buen nivel... Obviamente que tienes que competir con la U, Católica y Colo Colo. El chico bueno va ahí. Después caen en Palestino, Audax... Hay una realidad también: si no vas bien en la U, vas a Palestino. Estás a un metro. Mucho depende de la competencia a nivel de clubes y la captación. Obviamente, yo creo, es más fácil estar en un club como Audax Italiano y debutar en Primera División, que estar en un club como la U o Colo Colo. Si bien es cierto que estás en un club top, debutar ahí es mucho más difícil.

- Hay más exigencia en los clubes grandes. Si no rindes a la primera, te suelen castigar con las críticas...

- Exactamente. El futbolista que llegó al primer equipo de Audax, tal vez pudo encontrar eso: la facilidad de estar en un club de Primera División. Obviamente que debe tener condiciones, no es que te esté diciendo que todos pueden venir. Para mí, la fórmula de tener un 2001, un 2002, en una Sub 20, es un suicidio para esos chicos, porque no puede que ser un muchacho, a los 20, 21 años, todavía compita en el Fútbol Joven. Ya tienen que darle espacio a que vaya a préstamo donde el nivel le dé. Después, uno o dos te dicen ‘no, ¿te acuerdas de que te equivocaste?’ (con la decisión). Sí, pero hay dos sobre 100. No hay 100. No quiero salirme de la pregunta, pero hay cosas que se pueden hacer en el club. Hay material, sí, y tenemos siete chicos en Selección. Entonces, creo que esta será la línea.

- Hábleme de su experiencia con las academias de Juventus...

- Fue maravillosa, porque te relacionas directamente con el club. Reproduces el modelo-formato del equipo. Y me gustó porque muchos chicos respondieron a eso. No es una captación, ojo. Es solamente reproducir el modelo-formato de la Juve, pero es muy interesante, porque no es una cosa normal trabajar de esa forma en un país como Perú y Argentina. Es interesante estar adentro del proyecto y dar esta oportunidad de poder desarrollar cosas que se hacen en Turín. Además, los chicos en Latinoamérica tienen mucho talento. Ahí te da más satisfacción el verlos crecer a través del proyecto. Y también te hace crecer como entrenador. Aprendí del proyecto Juventus Academy y me gustaría también hacerlo como franquicia para nuestra academia (de Audax). Tenemos 11 en todo el país. Cuatro acá (en Santiago), el resto afuera, pero no son oficializadas, no tienen un sentido. Entonces, también por eso digo que te hace crecer como profesional.

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- ¿Le comentó eso último a los dirigentes de Audax?

- Sí. Están interesados en hacer esto. Ahora tenemos que ver cómo diagramarlo, porque esas 11 escuelas no son oficiales. Se ponen con el nombre y chao, pero no funciona así. Hay que darle un poco de seriedad a eso. Todas dicen ‘Club Audax’. Sí, pero... ¿cómo están trabajando? ¿Qué les están dando? Hoy por hoy, obviamente que no le puedes pedir a la gente (la directiva) que ya tenga hecho eso. No es decirle ‘ahora dame todo’. Hay que decirle que tenemos una prioridad sobre los chicos en captación. Eso, al final del día, va a ocurrir. Entonces, es interesante meter eso.

- Fuera del campo, usted tiene una historia bastante particular: estuvo en un reality en Perú, participó en ‘¿Quién quiere ser millonario?’ en Argentina y también siguió la palabra de Dios…

- El tema de la TV en Perú fue una etapa corta, de casi un año. Ya había dejado el fútbol, en 2015, y fue divertido, pero mi idea era siempre volver al fútbol. Nunca me gustó (la televisión)... Después, en Argentina se me dio ir a la televisión por intermedio de unos amigos, pero más por joder (sonríe). Ahora, con respecto a la palabra de Dios, soy cristiano. Asistía a una iglesia cristiana evangélica cuando estaba en Argentina y Perú. Me convertí en el 2008, cuando estaba en Perú. Es un estilo de vida, no son reglas y requisitos, como todos piensan. Tomé ese camino que cambió mi vida radicalmente y estoy contento de poder llevar a Dios en mi corazón.

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