De la U a Europa: “No me arrepiento de haber partido tan pronto; dejé de hacer tonteras”

Luis Rojas (21) volvió a Europa. Tras pasar unos días en Chile, donde entrenó junto a la Roja Sub 23 de Eduardo Berizzo y compartió con sus seres queridos, el volante retomó su vida en Italia y hoy se encuentra disfrutando de unas jornadas de descanso antes de sumarse nuevamente al Crotone, su equipo en la Serie C.

En ese contexto, el ex mediocampista de la U dialoga con AS a través de Zoom. “Estoy de vacaciones con mi pareja, hemos estado entrenando, y por ahora todo está bien. La idea es mantenerse y estar listo”, cuenta Rojas, quien en la última temporada jugó a préstamo en el Pro Vercelli, sumando 13 partidos y una conquista.

- ¿Qué sensación le dejó haber estado en un microciclo de la Roja Sub 23?

- Quedé feliz, porque ya hace un buen par de años que no iba. A veces me llamaban y no podía asistir, pero ahora logré ir y eso me dejó muy contento. Pude reencontrarme con compañeros como el ‘Dani’ González, Cristián Riquelme, y con varios de la U, Colo Colo y Católica que ya conocía por microciclos anteriores.

- ¿Qué conversó con Eduardo Berizzo?

- Lo que más hablamos es que tengo que estar jugando. Es una cosa lógica, porque si no lo haces no se puede ver el nivel ni cómo te puede utilizar en diferentes posiciones. Debo mantener el físico, la cabeza fuerte, y seguir jugando.

- ¿Cómo está en el aspecto psicológico?

- Muy bien, porque ya hace como un año tengo un grupo de trabajo. Vemos el tema mental, la meditación, hacemos ejercicios con los ojos, y eso me tiene tranquilo. Con mi pareja también, así que yo diría que estoy bien en todo sentido.

- ¿Se ve con chances de estar en los Juegos Panamericanos?

- Esperemos que sí, yo siempre estoy disponible.

- En el Pro Vercelli pudo volver a jugar y marcó su primer gol como profesional. ¿Sintió que recuperó la confianza, tras haber estado como en un segundo plano en Bologna y Crotone?

- Sí. De hecho, al ir allá, igual me la jugué un poco... Era o empezar de cero o mantenerme acá (en Crotone) y no saber si iba a jugar o no, pero con mi grupo de trabajo tomamos la decisión de ir y salió bien. Jugué todos los partidos, hice el gol, y me sentí feliz y con energía y confianza.

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- ¿No tuvo la opción de extender el vínculo?

- No, era hasta junio... Igual, ahora me gustaría ir a un equipo de Serie B para seguir jugando y de ahí ir pasando a Serie A y mantenerme. Aún soy joven, tengo 21 años, y puedo pasar por Serie B y esa misma experiencia llevarla a la Serie A.

- ¿Sufrió con el escaso protagonismo en Crotone y Bologna?

- Sí. Al principio, eso sí, cuando llegué me sentía súper bien físicamente y mentalmente. Cuando estábamos en Serie A, igual jugué y me sentía incluido. Pero después cuando vas perdiendo la consistencia de jugar, es un bajón, porque tal como los compañeros, uno se entrena toda la semana. Por eso mismo hice un grupo de trabajo para estar fuerte y que eso no me achaque.

- ¿Gary Medel le dio algún consejo en Bologna?

- Hablábamos de muchas cosas, pero de fútbol muy poco. Comíamos juntos y siempre estaba el mismo discurso: que tengo que mantenerme, que tengo que jugar y que debo alimentarme bien.

- ¿Se arrepiente de haber partido tan pronto de Chile?

- No, no me arrepiento, porque al final fue una decisión que tomé para sentirme bien conmigo y por mi familia. Lo que sí, quizás, cuando me iba de vacaciones no me alimentaba de la mejor manera y eso fue llevando a que regresara con peso de más. No me cuidaba bien... Eso repercute y más con el entrenador. Y es lógico: no puedo llegar a trabajar y estar mal.

- En las redes, la gente le suele preguntar por qué se fue tan rápido del país, argumentando que usted era un buen proyecto de la U...

- Sí, yo los leo, pero a veces la gente no entiende... Por querer llegar a un nivel alto y mejorar, a uno le pueden suceder estas cosas (jugar poco). Quizás me apresuré en salir de Chile, no lo sé, pero ya tomé la decisión y tengo que afrontarla. Debo mantenerme bien y espero ir a un equipo mejor y a una liga mejor.

- ¿Cuánto cree que ha crecido desde que salió de Chile?

- Mucho, pero al principio fue difícil, porque me vine solo. Tenía 18 años. Iba a entrenar, después hacía mis cosas en la casa y me ponía a hacer tonteras como jugar Play, por ejemplo, en vez de hacer otras cosas como las que hago ahora: el grupo de trabajo, el entrenamiento... Entonces, a nivel personal y profesional, de los 18 a los 21, he cambiado mucho.

- ¿Le han dado ganas de volver a Chile, a la U?

- A jugar, no sé. Ahora tengo que enfocarme en la temporada que viene, en llegar bien, así que eso no lo pienso mucho. Hubo un momento en que lo pensaba, que yo decía ‘quizás pueda volver seis meses’, ya que hubo un tiempo en que no estaba teniendo regularidad, pero después dije ‘para qué voy a estar pensando esto. Sólo me voy a llenar la cabeza de problemas, de otros pensamientos’. Decidí enfocarme en lo que tenía que hacer, que era entrenar y mantenerme bien.

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