“Dejé todo por mi madre con su cáncer terminal... Ella murió y no volví a ser el mismo jugador”
“Pensé que lo iba a poder superar, pero no, me afectó mucho”, confesó Iván Ledezma, jugador de Cobreloa, en una emotiva conversación con AS.
La vida de Iván Ledezma tuvo un antes y un después en el 2021, año en que su madre, Mireya Ahumada, fue diagnosticada con un cáncer terminal. El futbolista vivía la mejor etapa de su carrera, jugando a gran nivel en Audax Italiano y bajo el radar del Atlas mexicano, pero la trágica noticia familiar lo obligó a tomar una drástica decisión.
“Cuando a mi madre le confirman la enfermedad, yo tomo la decisión de ir a Deportes Antofagasta. Pude estar ahí con mi mamá, le expliqué la situación y ella estaba muy contenta porque extrañaba a su gente. Cuando llegamos, no pasaron ni dos meses y ella falleció”, señaló el actual volante de Cobreloa, en entrevista con AS.
“Pensé que lo iba a poder superar pero no, me afectó mucho y no pude volver a ser el mismo jugador. Todo se me desmoronó, perdí mucho en el fútbol. No asimilé la pérdida, ella era todo para mí... En la última conversación, ella me dijo que estuviera tranquilo, que di todo como hijo y que me dedicara ciento por ciento al fútbol”, complementó ‘Titi’.
- Por lo que recojo de sus palabras, la muerte de su madre impactó demasiado tanto en lo familiar como en lo profesional...
- Influyó mucho y sin darme cuenta. Pensé que lo iba a poder superar, pero uno con más madurez se da cuenta de que influyó en mi profesión, en mi familia. Creo que no asimilé la pérdida. Fueron tres años muy complicados.
- ¿Quiénes fueron sus soportes en aquellos complicados años?
- Sin duda, mi esposa y mis hijos. Me aferré a ellos y a un par de familiares y amigos. Me costó salir, mis hermanos y mi padre también me apoyaban, sabían que me podría costar volver al fútbol y estaban bien preocupados. Me lo guardé todo, soy un jugador que se guarda mucho las emociones. Eso fue un gran problema también.
- Después de lo vivido, ¿pasó por su mente la opción de dejar el fútbol?
- No, porque como te dije anteriormente, en la última conversación con mi madre, ella me dijo que estuviera tranquilo y que me dedicara ciento por ciento al fútbol.
- ¿Qué más recuerda de aquella última conversación con su madre?
- Conversamos sobre la vida, como madre e hijo. De que yo fuera un buen padre, que cuidara bien a mis hijos, que fuera respetuoso con mi señora. Me dijo que siguiera en alza en el fútbol, que no bajara por su partida. Pero igual caí en una baja muy grande.
- Esos años complicados, ¿lo sintió como una depresión?
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- No sé si depresión, pero algo parecido. Todo lo ocultaba para mí, aunque no lo demostraba. Guardaba mucho mis sentimientos sobre el fallecimiento de mi madre, no era que estaba callado en el día a día, pero la pena y la tristeza siempre las oculté.
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