“Dormir en un taxi” y “sacarlo de los prostíbulos”: revelan historias del fútbol chileno

“Es elemental recordar y crear una memoria futbolística”. Esa es la frase con que Carlos Barraza (32), profesor de historia y ciencias sociales, explicó la motivación que tuvo al escribir el libro “Astros: los seleccionados internacionales que jugaron en Chile”. El profesional encabezó el lanzamiento de la obra en Casa Estadio.

“Mis libros, tanto ‘El Olimpo de los Olvidados’ como ‘Astros’ tienen la premisa de desenterrar del olvido a íconos del fútbol chileno y mundial. Además, busco enseñarle a las generaciones que vienen sobre el legado de estas grandes figuras. Mis libros tienen un sentido pedagógico e histórico”, relató Barraza, quien se ha desempeñado como corresponsal acreditado.

- ¿Entonces cree que es indispensable repasar la historia de los futbolistas antiguos?

- Sí, desde los ídolos e íconos más recordados en tiempos actuales a aquellos que el tiempo paulatinamente ha ido dejando atrás. Hay que dejar testimonio a las futuras generaciones de que incluso hubo campeones continentales y mundiales que dejaron su huella en el fútbol chileno, que hubo un “arquero cantor” (Julio Musimessi), un campeón con dos selecciones distintas (Raimundo Orsi) y el máximo goleador del fútbol argentino (Ángel Labruna), quienes de una u otra forma marcaron un hito con tan solo pisar una cancha chilena.

- ¿Cómo elegió a los jugadores que aparecen en el libro?

- En un principio la intención era abarcar a todos los seleccionados internacionales, pero fue imposible porque solo con los jugadores argentinos se terminó de dar forma a un libro que no es breve. El principal requisito para formar parte del libro era que hayan disputado al menos un partido con la selección adulta de Argentina y que hayan participado en más de un partido en el fútbol chileno. Hubo algunas excepciones, como en el caso de Mario Desiderio, ídolo de O’Higgins de Rancagua que sólo jugó partidos por la selección panamericana y olímpica de Argentina.

- Imagino que el libro tiene varias anécdotas...

- Por ejemplo cuando, producto de las réplicas del terremoto de 1960, Ángel Labruna, máximo goleador histórico del fútbol argentino, debía dormir en un taxi con su familia y en la mañana ir a entrenar a Rangers de Talca. O cuando Sergio Livingstone debía ir de madrugada a sacar de los prostíbulos a José Manuel Moreno, quien después era el primero en llegar a entrenar o terminaba siendo la figura de los partidos. También está el caso de Fernando Gamboa, central que jugó en Colo Colo y se llevó el equipo de entrenamiento de Colo Colo, ad portas de la quiebra, en parte de pago.

- A propósito de Moreno, ¿fue el mejor jugador que pasó por Chile?

- Muchos tienen su legado, pero sin lugar a dudas es José Manuel Moreno. Algunos dicen que por técnica fue Marcelo Trobbiani, pero lo que implica la llegada de Moreno, en plenitud de condiciones, es notable. Él fue uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol mundial y quinto a nivel sudamericano, y en Chile fue campeón y figura en 1949. Eso da cuenta de su paso por nuestro fútbol fue realmente exitoso.

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