Colo Colo
"Dos días antes de morir, en un momento de lucidez, le tomé la mano y le hablé; fue el adiós"
Marcelo Espina recordó a su padre Marcelino, quien falleció hace unas semanas. “Mi viejo me ayudó, pero nunca me empujó a ser futbolista”.
Marcelino Espina, papá de Marcelo, falleció hace casi un mes y el ex futbolista de Colo Colo dio detalles del deceso y de la vida del que fuera pilar de su carrera. El hombre, que dejó de existir a los 89 años, trabajó en el Cacique como captador de jóvenes talentos.
“Eso fue lo que siempre le gustó. En Colo Colo, con el ‘Chano’ Garrido, iba en un auto con 300 mil kilómetros de recorrido entrando a pueblos y canchas... David Trezeguet era el que lo vestía como captador”, recordó en conversación con LUN.
Sin embargo, en el último tiempo su salud se empezó a deteriorar. “El año pasado tuvo problemas renales y empezó a dializarse. Al final, tenía cierto grado de demencia senil... Él era un hombre grande, estaba apagándose hace meses y por supuesto que todos esperábamos que se fuera de un momento a otro”, contó.
“Pude estar con él hasta el final. Dos días antes de morir, cuando ya tenía momentos variables de lucidez, le hablé y le tomé la mano. Fue el adiós”, añadió.
Finalmente, sobre el impacto de Marcelino en su carrera, el ‘Cabezón’ recalcó que “Me ayudó, pero nunca me impulsó a ser futbolista. Él me las bancaba todas. Sólo una vez no le gustó una decisión que tomé: cuando me fui a jugar a México. Nunca me dijo por qué”, cerró.