El arquero del futuro que debió salir de la U: “Fue raro y me costó, pero necesitaba esto”

Con sólo 18 años, Ignacio Sáez consiguió debutar en el fútbol profesional. El joven arquero, que pertenece a Universidad de Chile, tuvo su primera chance en Deportes Recoleta, elenco que lo fue a buscar para pelear un puesto en el conjunto de Luis Landeros. Si bien perdió dos de los partidos que jugó (1-0 contra Magallanes y 1-0 ante San Luis) e igualó uno (0-0 con La Serena), ‘Nacho’ llamó la atención por su tranquilidad y madurez en el arco.

“Me he sentido muy cómodo. Es una experiencia nueva porque desde chico que estoy en la U, pero de verdad ha sido muy positivo. Me encontré con un grupo humano que me ayudó a adaptarme. Sólo puedo decir cosas buenas”, comenta Sáez en el inicio de su charla con AS Chile.

- ¿Cómo se dio este fichaje?

- Fue de forma rápida, porque no esperaba irme a préstamo. Sin embargo, analizándolo con hartos ‘profes’, llegamos a la conclusión de que era la mejor opción. Si bien era parte del plantel de la U y estábamos rotando en la juvenil, lo que era bueno porque podía jugar, sentía que necesitaba esa competitividad que daba un desafío así. En cuanto al club en sí, se había lesionado (Jaime) Vargas, entonces necesitaban a un arquero que pudiera luchar por el puesto. No me prometieron jugar, pero sí me dijeron que si me entrenaba bien y rendía, tendría la oportunidad.

- ¿Fue muy rudo el cambio de la U a uno de los clubes más humildes de la B?

- Es muy distinto, pero no para mal. La U lo tiene todo y llegar a un club al que no le hace falta nada, pero que sí es distinto, fue raro y la primera semana me costó. Pero el grupo me ayudó y estoy muy contento. Es una familia, puedo hablar con cualquiera y va a ser la misma onda siempre.

- Ya pudo jugar tres partidos en el profesionalismo. ¿Qué significa eso para usted?

- Me he sentido muy bien, por más que los resultados no han sido los esperados. Antes del debut, pensé que estaría aún más ansioso y nervioso por la presión, pero me encontraba muy tranquilo. Ya durante los partidos me sentí bien y me mantuve alerta gracias al trabajo de mis compañeros.

- ¿Siempre quiso ser arquero?

- Empecé siendo delantero, pero yo solo me fui yendo para atrás (ríe). Mi papá un día me dijo que tenía que elegir un puesto y decidí el arco. A él le gustan mucho las matemáticas y siempre me hablaba del arco y la geometría, la distancia del balón, me ayudaba mucho y desde ahí partí. A los 9 años llegué a la U y desde ese momento no me moví del arco.

- ¿Cuáles son sus metas para esta temporada?

- Mi objetivo es segur sumando experiencia y rindiendo a un buen nivel. Se viene el Mundial y el Sudamericano también, entonces es una motivación muy grande para crecer.