El caso Joan Cruz
Debía presentarse este martes al entrenamiento de Colo Colo, pero Joan Cruz no apareció por el Monumental. Está claro: el ex seleccionado Sub 20 dio por terminada su etapa en el Cacique y ahora parece que su futuro se encuentra en Europa. Puntualmente, en la segunda división de España, pues la información es que Oviedo y UD Ibiza tienen en sus planes al volante ofensivo.
Los bromistas de siempre al tiro van a salir diciendo que Cruz apenas está para irse a la calle Europa por el nivel de juego que mostró con la Roja juvenil, durante el Sudamericano disputado en Colombia. Si así fuera, no se salva nadie del plantel. Solo por algunos minutos ante Ecuador, el equipo estuvo a la altura de las exigencias del certamen y todos son responsables. Hasta Darío Osorio y Lucas Assadi, los jugadores de mayor proyección internacional de los últimos años en Chile.
En Colo Colo insisten en que el contrato de Cruz se renovó automáticamente tras completar el porcentaje de citaciones incluido en una de las cláusulas. Sin embargo, no es lo mismo ser parte de los jugadores concentrados y terminar observando el partido en la tribuna, que sentarse en la banca y ser una opción válida para el entrenador al borde de la cancha. La estadística es brutal: el canterano apenas jugó 9 minutos en el Campeonato Nacional 2022 y en otros cuatro encuentros fue suplente. ¿Tan mínima era la exigencia de citaciones para renovar? Parece absurdo.
Lo que tiene que hacer Cruz es tomar sus cosas y partir no más a la segunda división española. Jamás va a jugar con Gustavo Quinteros en la banca, no hay vuelta que darle al asunto. El mediocampista pudo actuar en tres de las cuatro posiciones del bloque ofensivo (puntero derecho o izquierdo o volante creativo), pero el DT -en pleno derecho de sus prerrogativas profesionales- optó por otros hombres.
Las decisiones de Quinteros, en relación a los futbolistas jóvenes del plantel, invitan a la reflexión. El DT del Cacique no comulga con los canteranos, a pesar de que estos van dando muestras de que pueden tener más minutos de acción. Aparte de Cruz, lo que pasa con Alexander Oroz y Daniel Gutiérrez resulta paradigmático. Estaban y están para más continuidad entre los titulares, e iban a avanzar en su nivel de desempeño actuando regularmente. Sin embargo, también se encuentran postergados.
Aunque parezca un contrasentido, la responsabilidad en absoluto recae en Quinteros. Es un técnico experimentado, exitoso en todas las partes donde anduvo, y tiene sus formas propias de trabajo. Lo que no está claro es la política del club al respecto. Históricamente, Colo Colo ha tenido siempre los mejores jugadores de Chile del fútbol formativo. Los albos deben ser capaces de generar una estructura que estimule la participación constante de los canteranos. La institución no debería estar al son de los estados de humor del entrenador de paso por el primer equipo. Sería muy bueno no solo para el Cacique, también para todo el fútbol chileno. Dramáticamente, nos estamos quedando sin jugadores para la Selección.
Mientas esto no pase, a Cruz solo le queda marcharse. Iniciar todo de cero en otra parte y si en este lugar la proyección futbolística es mayor, chao no más. Cómo no va ser mejor pasar de jugar solo 9 minutos a participar en la segunda categoría de una de las cinco mejores ligas del mundo. Apenas tiene 19 años, es un jugador todavía en plena formación (el futbolista chileno madura mucho más tarde) y puede hacer una nueva vida en Europa. ¿Si le va mal? No se acaba el mundo, ¿sería el primer juvenil chileno que tiene que regresar al país? Tiene que intentarlo.