Entrevista AS | Parte II
El DT que lleva dos años cesante en el fútbol chileno: “Lo primero de esto es no hacer sentir a la familia”
Patricio Lira irrumpió en la B con buenos resultados en su momento. Hoy, lidera un proyecto municipal, pero espera volver: “Estamos con ganas y deseos”.
Patricio Lira dejó la dirección técnica de Fernández Vial a fines de 2022 y no ha vuelto a comandar un plantel. Quedó atrás también su auspicioso estreno en la banca al mando de Temuco. El DT chileno debutó en el conjunto de La Araucanía en 2019 y se mantuvo en el club por tres temporadas, accediendo en cada campaña a la liguilla del Ascenso.
A la espera de una nueva posibilidad para dirigir, Lira se mantiene activo en otras labores en su natal Temuco. El DT se formó como futbolista en el club sureño, actuó por años en el primer equipo y, tras un paso por el área formativo, inició su carrera en la dirección técnica del cuadro del ex goleador Marcelo Salas.
“Estoy a cargo del fútbol urbano en la municipalidad de Temuco. Hay que ver el funcionamiento de 45 escuelas de fútbol y lo que es el fútbol amateur. Es un programa especial, porque las escuelas de fútbol están apalancadas con los clubes del fútbol amateur. Tenemos que capacitar a los jugadores y realizar también clínicas de fútbol. Se incorporaron también al proyecto Cristian Canio y Hugo Droguett para que transmitan sus vivencias a los niños”, afirmó a AS Lira, de 43 años.
- Por lo menos sigue ligado al fútbol y se mantiene activo en eso…
- Sí, por supuesto. Además, comento los partidos de Temuco en una radio y eso me permite estar siempre al tanto del campeonato, de la forma de jugar. Eso me mantiene vigente.
- ¿Qué hace hoy junto a su cuerpo técnico? ¿Se reúnen, analizan equipos o revisan formas de trabajo?
- Sí, por supuesto. También hemos hecho una autocrítica sobre lo que hicimos en Fernández Vial en la última etapa. Estamos viendo nuevas metodologías. Somos un cuerpo técnico joven además, está Juan Pablo Toro de ayudante y Sebastián Matus en la preparación física. Estamos con ganas y deseos de reinsertarnos, porque creemos que podemos seguir mostrando lo que exhibimos en un momento.
- Cuando partió como DT seguramente imaginaba períodos sin trabajo, porque así es la labor. ¿Cómo ha sido en la realidad?
- Sí, lo primero de esto es no hacer sentir a la familia. Tengo hijos en la universidad y en el colegio y lo que le pase al papá, en este caso, no les compete a ellos. Siempre he sido precavido, tengo una academia de fútbol acá que ya tiene 10 años, con alrededor de 180 niños. Eso genera un ingreso y permite no estar desesperado. Después, tuve la posibilidad que me brindó acá el alcalde Roberto Neira de invitarme a su proyecto. Es un desafío importante y es en mi ciudad.
- Además, le permite mantenerse en actividad y con la mente puesta en una labor…
- Sí, lógicamente. Aparte uno va viendo jóvenes acá, viendo talentos. Al andar todas las tardes por las canchas de Temuco se van descubriendo jugadores y eso, a la larga, también es beneficioso. Uno va aprendiendo también de los profes que va mirando. Estás conversando y obviamente que la mente se mantiene ocupada. Dicen que el entrenador que solamente sabe de fútbol, al final, ni de fútbol sabe.
- Claro, tiene sentido la frase…
- Al final, te encasillas tanto que he aprendido con el tiempo que la labor del director técnico tiene mucho de habilidades blandas. Eso hay que desarrollarlo día a día, conversar con los jugadores para apoyarlos, entregarles herramientas. La cantidad de jugadores que hicimos debutar en Deportes Temuco fue importante.
- ¿Cuántos fueron?
- Fueron 12 los que hicimos debutar en nuestro proceso. Pudimos potenciar a otros también. Hoy vemos Matías di Benedetto, que había jugado toda su vida en Primera B, jugando en Copa Libertadores con la U de Perú es bueno. Mantenemos contacto y nos dice que está agradecido. Uno tiene que entregarles herramientas a los jugadores para que sigan creciendo.