El increíble partido de Arturo Vidal: lo que se vio y no se vio por TV

Los uruguayos no lo podían creer, pero era verdad. Arturo Vidal, para muchos el mejor futbolista de la historia del país, llegaba al debut de las Eliminatorias cuestionado por gran parte de la hinchada chilena, que “pedía a gritos” su retiro de la Selección.

La otra cara de la moneda vivían los charrúas, que en su gran mayoría no daban crédito a cómo Marcelo Bielsa había “cortado” a Luis Suárez, posiblemente el mejor jugador de la historia del país oriental.

Lejos de hacer caso a esos pensamientos, el “King” llegó a la Roja como uno más y con ganas de mostrar, como tantas veces, su jerarquía. Debido a problemas en una de las rodillas, Vidal arrancó en el banco de suplentes, pero la “blanda” presentación del combinado nacional en el Centenario obligó su ingreso en la segunda mitad.

Antes de eso, Vidal ya era protagonista en Montevideo. A eso de los 20′, cuando aún el partido estaba 0-0, el mediocampista se levantó como si nada del banco y corrió hacia el técnico Eduardo Berizzo para comentarle algo. El “Toto” lo escuchó con atención y, después de eso, siguió repartiendo instrucciones a sus pupilos.

Tras ello, Vidal fue un segundo técnico al borde de la cancha. El volante del Athletico Paranaense reclamó todo, al mismo tiempo que gritaba y arengaba a sus compañeros, y miraba de reojo a Berizzo para poder entrar. “La Bestia” estaba desesperada.

Antes del cierre de la primera mitad, Berizzo mandó a calentar a gran parte de los jugadores de la alternativa, pero en ese grupo no estaba el ex Juventus y Bayern Múnich. Muchos pensaron que los problemas físicos iban en serio y que, probablemente, lo estaban cuidando para estar el martes ante Colombia.

Los detalles tras el ingreso de Arturo Vidal en el Centenario

Cuando terminó el primer tiempo, el “Rey Arturo” saltó como un león de su asiento y corrió a esperar uno por uno a sus compañeros que estaban jugando. A todos les dio la mano, los abrazó y les dio un mensaje de ánimo. El “King” irradiaba energía en Montevideo.

Ya en la segunda mitad, y con el marcador 0-2 en contra, Berizzo mandó al campo de juego al “King”. Allí todo cambió. El ex Colo Colo, como tantas veces, entró a la cancha y rápidamente se transformó en el mejor del equipo. No sólo eso, pues marcó el descuento y levantó el nivel de sus compañeros, principalmente de Diego Valdés, quien fue su gran socio en el Centenario.

Tras el pitazo final, Vidal fue el primero en ofrecer declaraciones a la prensa y fue el último en abandonar la cancha. Antes de hacerlo, corrió hacia la hinchada chilena y repartió abrazos y fotos. Antes de irse del recinto, incluso, bromeó con los elogios que le dedicó Federico Valverde, capitán de Uruguay y figura del Real Madrid, en la previa del choque por las Eliminatorias.