El multifacético del fútbol chileno, otra amenaza para la salvación de Unión Española
Reapareció a gran nivel en la segunda rueda y comenzó también la mejor etapa de su equipo, que lo tiene en la disputa por el ‘Chile 2′. Actúa en todas los puestos de ataque.
La buena campaña de O’Higgins en 2025, sobre todo en el cierre del Campeonato Nacional, ha tenido varias figuras destacadas, como Bryan Rabello, Luis Pavez y Maximiliano Romero.
Pero, otro jugador del equipo rancagüino también ha llamado la atención por su desempeño. Se trata de Martín Sarrafiore, futbolista multifuncional de la escuadra que comanda Francisco ‘Paqui’ Meneghini, que enfrentará a Unión Española en un duelo clave por las salvación de los hispanos.
El rol del argentino, de 28 años, ha sido determinante en el funcionamiento general de O’Higgins durante toda la segunda rueda. Un contrapunto en relación a lo que le tocó vivir en la primera parte del torneo, ya que sólo tuvo participación en cuatro partidos. A fines de 2024, el zurdo había sido operado por una ruptura de menisco y, meses después, otra vez permaneció meses sin aparecer en las convocatorias.
Sin embargo, a contar de la fecha 16, la presencia del argentino se empezó a notar, al punto de tornarse crucial en la acción creativa y de ataque de O’Higgins. Uno de los aspectos de juego que ha llamado la atención de Sarrafiore es la versatilidad posicional en el contexto del sistema 1-4-2-3-1 que emplea Meneghini. Ha actuado de volante ofensivo, centrodelantero y de extremo derecho e izquierdo, pasando así por los cuatro puestos del bloque ofensivo.
Perfil de juego
Sarrafiore es un volante ofensivo nato que puede desempeñarse también en otras funciones de Construcción. Por el Campeonato Nacional exhibe un registro de 16 partidos disputados, 12 titularidades, tres goles y dos asistencias. El zurdo llegó a Rancagua en enero de 2024 y, en la temporada pasada, realizó un aporte futbolístico significativo al jugar 26 encuentros, convertir tres tantos y realizar también dos asistencias. El argentino es un fichaje que le ha dado réditos de juego a O’Higgins.
Con Rabello en el mejor año de su carrera en Chile, inicialmente Meneghini le buscó un rol secundario a Sarrafiore, que más continuamente fue como extremo. Sin embargo, hoy la influencia del trasandino resulta relevante en el funcionamiento colectivo, a raíz de las intervenciones continuas en la fase de elaboración de juego y en el ciclo final de ataque.
Versión propia
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Sarrafiore encaja en el perfil de un extremo asociativo, con movilidad para centralizarse e incidir en las habilitaciones para dejar a algún delantero en instancia de Finalización. La mayoría de sus intervenciones comienzan en el espacio lateral de ataque, pero rápidamente aparece en la franja intermedia y desde allí se desplaza además hasta el eje ofensivo. Entonces, Rabello, el ‘10′ rancagüino, abandona su sector de acción y, a lo ancho o en profundidad, se convierte también en un destinatario de las habilitaciones del argentino.
El aspecto central de juego de Sarrafiore es su amplia capacidad técnico-táctica. Genera opciones de pase que implican Progresión y, en las recepciones, no tiene problemas para encadenar las acciones siguientes, por su ductilidad en el manejo del balón. También, garantiza la continuidad ofensiva mediante maniobras de dribling efectivas. En la zona del semicírculo penal, el zurdo finaliza las acciones de ataque con tiros potentes y dirección adecuada al contar con tiempo y espacio suficientes para la ejecución de la maniobra individual.