El olvidado paso de un chileno por España: “En mi primer partido marqué a Mandzukic”

Uno de los últimos grandes proyectos de la Universidad de Concepción fue el volante Gerardo Navarrete. Debutó en el primer equipo con solo 15 años y a los 18 ya llamaba la atención del fútbol de Europa.

Así, en 2014 fue traspasado al Granada y cedido al Cádiz, elenco que en ese minuto militaba en la tercera categoría española. Ahí jugó 32 partidos, luego fue parte de la filial del equipo dueño de su pase y totalizó más de 70 encuentros. Al final se mantuvo por cuatro temporadas en el Viejo Continente y también sumó un paso por Hércules. Tras volver a Chile pasó por O’Higgins, Coquimbo y Unión. Hace unos días le anotó un gol a Rodelindo Román y ayudó a que Concepción se quede en la Segunda División Profesional.

“Me fui muy joven a Europa, pero fue lindo. Es otra idiosincrasia, el día a día es distinto y el fútbol es más rápido y táctico. Esos años fueron inolvidables, quedarán siempre en mi recuerdo”, cuenta en diálogo con As.

- Solo pudo jugar en la tercera categoría hispana, ¿por qué cree que no pudo dar el salto?

- Partí con solo 18 o 19 años. A esa edad te hablan de la posibilidad de ir a Europa y dices de inmediato que sí, no piensas en nada más. Creo que me faltó quedarme uno o dos años más en Chile y madurar.

- ¿Cuál es el mejor recuerdo que guarda de esos años?

- El primer partido con el Cádiz fue contra Atlético de Madrid. Imagínate, pasé de estar en Chile a jugar contra ese equipo que es muy grande. Había estadio lleno y me tocó marcar a (Mario) Mandzukic. Medía como dos metros ese croata, jajajá. Todo ese recuerdo lo tengo como si hubiese sido ayer. ¿Si cambié camisetas? Tengo varias: Atlético, Villarreal, Rayo Vallecano...

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“En O’Higgins nunca me sentí cómodo”

- Mientras estuvo en España, ¿tuvo chances de volver a Chile en esos primeros años?

- Mi representante me habló, me dijo que algunos equipos preguntaron, pero nada concreto. Supe que era uno de los grandes, pero no me dijeron cuál de los tres.

- ¿Cómo evalúa sus pasos posteriores por O’Higgins y Coquimbo?

- En O’Higgins nunca me sentí cómodo, no era yo. Creo que me faltó personalidad en ese sentido, demostrar que quería jugar, todo pasó por ahí. En Coquimbo creo que lo hice muy bien, ese equipo clasificó a la Copa Sudamericana.

- Su último club en Primera fue Unión, ¿qué tal fue ese paso?

- En mis primeros partidos lo hice relativamente bien, después hubo un cambio de técnico y me sacó del equipo, quizá porque no me conocía. Luego volví a jugar y anduve bien.

- Llamó la atención que después pasara directo de Primera División a la tercera categoría con Concepción, ¿qué ocurrió?

- Tenía opciones de quedarme en Primera, pero el esperar que saliera algo mejor me pasó la cuenta y después cuando quise agarrar algunas de las ofertas iniciales, las chances ya estaban cerradas. Había que tomar la decisión en el momento y esperé mucho. Luego, en junio me contacté con Gabriel Vargas y me preguntó si estaba interesado en jugar en Concepción. No lo dudé, llevaba mucho tiempo parado y me servía.