ADN RadioConcierto Radio
NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

U. de Chile - U. Católica

La otra lucha del Clásico: pragmatismo vs estética

Diego López y Ariel Holan vivirán un duelo aparte en las bancas de la U y la UC. Dos estilos diferentes con resultados también dispares.

La otra lucha del Clásico: pragmatismo vs estética

La jornada sabatina de la fecha 23 del Campeonato Nacional estará marcada por una nueva edición del Clásico Universitario. A partir de las 15:00 horas, Universidad de Chile recibirá a Universidad Católica, en el Estadio Nacional, y será la primera oportunidad en que se enfrenten Diego López y Ariel Holan. El duelo estratégico, sin duda, tendrá varios aspectos de relevancia.

Formas opuestas

El primero en abordar el desafío fue Holan, entrenador de la UC. “Respeto mucho a la U y a su técnico (López). Muchas veces se piensa que los entrenadores son malos y que tienen las soluciones inmediatas. No es magia, es trabajo y eso requiere tiempo”, sostuvo el argentino.

Lo concreto es que el elenco cruzado paulatinamente ha ido avanzando en el diseño futbolístico que propone Holan. El propio estratega lo explicitó en la antesala del clásico: “Llegamos (en ataque) de manera asociada, con muchos hombres al área. No tirando pelotazos y jugando a segundas pelotas, porque esa es nuestra identidad y yo creo que eso lleva un tiempo de elaboración”.

La UC emplea el Ataque Construido y este concepto permea todo su accionar. Es un equipo que busca controlar el juego, mediante el manejo del balón con el objetivo de generar constantemente acciones de finalización. Una de las consecuencias de esto es que los cruzados procuran que el eje del desarrollo de las acciones esté siempre en el sector rival, con la última línea situada constantemente en la línea de la mitad de la cancha (bloque alto de presión).

En la U, hasta ahora, el panorama es distinto. Los azules, bajo la conducción de López, no son un equipo que controle el balón y concentran principalmente sus esfuerzos en contener los avances del cuadro oponente (bloque bajo de presión). Ceden la iniciativa y se dejan dominar, lo que indudablemente ha ocasionado el bajo desempeño actual.

Debido a que el proceso ofensivo no es coherente con la propuesta al momento de defender. La U alterna entre momentos de Ataque Directo y Contraataque, y no es eficaz en ambas facetas. Claro, defendiendo atrás en el terreno de juego, cuenta con tiempo y espacio para generar situaciones de finalización, pero en ese instante el fútbol no fluye.

Estrategias de juego

En el encuentro de este sábado, no deberían haber grandes novedades en relación a las formaciones que vienen mostrando últimamente ambas escuadras. Con algunos matices puntuales, tanto López como Holan parecen haber dado con el equipo base que todo entrenador intenta siempre establecer.

En la UC el asunto está más que claro con el sistema de juego 1-4-3-3 que es parte esencial de la propuesta de Holan. El argentino evaluó otras posibilidades (esquemas posicionales 1-4-4-2 y 1-3-5-2), pero al final se mantuvo fiel a sus fuentes tácticas.

Tal vez, la novedad pueda ser en la línea ofensiva la presencia de Fabián Orellana, cerrando el ataque en la posición de puntero izquierdo. Clemente Montes y Gonzalo Tapia también han actuado ahí, pero al aparecer el DT no está conforme con esos desempeños. Orellana puede aportar desborde, centralización para intervenir en la elaboración y los apoyos defensivos que hoy exige la posición. Claro, si comienza a acercarse al nivel que se le conoce en Chile.

La U de López, en tanto, oscila entre dos organizaciones posicionales desde el mediocampo al ataque. Esto en el marco de los sistemas de juego 1-4-4-2 ó 1-4-2-1-3 que ha empleado el DT. A raíz del poderío que ha ido recuperando la UC en la zona de volantes, no resulta descabellado que los azules se organicen con un doble ‘6′ (Israel Poblete y Emmanuel Ojeda) y un hombre creativo por delante (Jeisson Vargas o el juvenil Agustín Arce). Tal disposición garantiza la igualdad posicional y numérica al momento de defender, lo que se supone hará la U durante mucho tiempo en el clásico.

Al menos uno cosa sí les da algo se seguridad a los locales este sábado en el Nacional. Nery Domínguez se recuperó del desgarro que había sufrido y formará la dupla de centrales con Bastián Tapia. La inclusión del argentino brinda buen funcionamiento posicional, conducción de la última línea y eficacia en los duelos. Una gran noticia para los azules antes de medirse contra la UC.