“En algún momento sentí que mi carrera se había acabado; acá encontré la paz que no tenía en Chile”

Esta semana, AS publicó las dos primeras partes de la entrevista a Jordhy Thompson. En ellas, el delantero del Orenburg habló de sus ganas de estar en la Roja y recordó su etapa en Colo Colo. Ahora, en el tercer extracto de la conversación, el futbolista de 20 años cuenta cómo es su vida en Rusia y deja múltiples reflexiones.

“Voy a dar lo mejor de mí... Fuera de la cancha quiero ser maduro, para poder demostrarle a la gente que las personas cambian y pueden estar súper bien”, afirma Thompson, en relación a los problemas que ha tenido con la justicia. En su momento, él estuvo en prisión preventiva por femicidio frustrado y desacato.

- ¿Cómo es su vida en Rusia?

- Acá es súper tranquilo. Puedo salir tranquilo y nadie me dice nada. En Chile, obviamente, por el problema que tuve, no me gustaba salir tanto. Me refiero a ir al mall, por ejemplo... Pero siempre me lo he tomado de una forma tranquila, porque es un error que cometí. En Chile va a ser tema, te van a mirar feo y la gente te va a criticar, pero uno también se mandó cagadas y tiene que saber afrontarlas. Entonces, hay que saber afrontar las cosas y no volver a cometer los mismos errores. Acá la vida es súper tranquila y encuentro que tengo la paz que no tenía en Chile. Allá había una presión bastante alta.

- ¿Qué consejos le manda su mamá desde Chile?

- Yo creo que mi mamá siempre me va a desear lo mejor. Ella siempre me decía que tengo que ser feliz, que no cometa errores, que esté tranquilo y que solamente juegue al fútbol, que es lo que más me gusta.

- Usted recién decía: “No quiero volver a cometer los mismos errores”...

- Sí, es que yo creo que cuando uno quiere hacer cambios de verdad, y te lo propones, se te van dando las cosas, aunque sea de a poco. He estado súper tranquilo en Rusia y esa es una de las cosas que me ha ayudado a mejorar, a hacer las cosas bien y no cometer errores. Si bien no he mejorado del todo, estoy en ese proceso de ver la realidad, de ser más profesional, de cuidarme con las comidas y de estar tranquilo. Al final, si tú estás tranquilo, descansas y comes bien, vas a rendir en la cancha.

- Si tuviese que hablar de una persona que siempre lo ha apoyado, ¿de quién hablaría?

- En altos y bajos, mi abuelita por parte de papá. A ella la admiro, es la número uno. Ella siempre me llevaba a entrenar en Antofagasta y ahora cuida a mis hermanos. Siempre está presente y por eso yo le digo que lo que necesite, me lo pida. Por ejemplo, ella a veces me pide cosas y me dice ‘pucha, disculpa que te moleste...’. Y yo en mi mente digo ‘¿pero cómo se te ocurre decirme eso? Con todo lo que me has ayudado’. Estoy súper agradecido de ella.

- ¿Ha pensado en llevarla a Rusia?

- Es que a ella le da miedo andar en avión. Piensa que si ella no viaja en avión desde Antofagasta a Santiago, lo hace en bus. Entonces, imagínate... Viajar acá son dos días y medio o tres volando. Pero bueno, yo la ayudo constantemente. Yo no quiero que trabaje más, quiero que ahora disfrute y esté tranquila.

- ¿En qué trabaja su abuela?

- Ella tenía una pensión y arrendaba piezas, pero yo no quiero que trabaje más. Solamente quiero que esté tranquila, porque ya es mucho lo que hizo por mí... Entonces, yo creo que ese es el sueño de todos los niños: que la persona que te ayudó y que siempre estuvo contigo, deje de trabajar cuando a ti te esté yendo bien.

- ¿En qué etapa de su vida se encuentra usted?

- Bueno, yo quiero madurar más. Quiero darme cuenta de las cosas que hacen bien y de las que hacen mal. Quiero saber separar las cosas y entender cuándo sí se puede y cuándo no. Me estoy dando cuenta de lo importante que es la carrera de futbolista cuando uno se enfoca. Si uno hace las cosas bien, tu carrera va a ir subiendo... Yo sueño con ayudar a mi familia y tener tranquilos a mis hermanos. Quiero madurar, hacer las cosas bien y no cometer los mismos errores. Esos errores pudieron haber causado el término de mi carrera, por ejemplo.

- Justamente, quería preguntarle por eso último...

- Sí, en algún momento sentí que mi carrera se había acabado, pero no sé si fue Dios, mi papito o mi abuelo, que me ayudaron a salir adelante. Estoy agradecido... Me di cuenta de varias cosas, pude salir adelante y ahora estoy en una etapa en la que quiero solamente mejorar, madurar y ser feliz.