Ex jugador de la U prepara su adiós con 31 años: “Si no hay ofertas, mi retiro es inminente”

La carrera profesional de Bryan Cortés (31) podría estar llegando a su fin. Tras su ultimo paso por Deportes Recoleta en la temporada 2022, el mediocampista, quien en algún momento fue comparado con Charles Aránguiz, no ha encontrado club. “Que sea lo que Dios quiera. Si no hay una oferta, veré otro rumbo en mi vida”, comentó.

El volante se formó en Cobreloa y el año 2013 se lo pelearon Colo Colo y la U, pero al final decidió calzarse la camiseta azul. Su fichaje en el cuadro laico suponía un nuevo desafío en su carrera, ya que llegaba con un buen cartel tras disputar una final nacional en 2011 con los loínos. Sin embargo, la continuidad en el CDA nunca llegó. “Es responsabilidad mía. Debí haber estado mas enfocado en mi carrera”, confiesa. En 2015, el jugador partió a préstamo a Santiago Wanderers, para luego retornar al equipo azul. Sin mayor protagonismo, el nexo entre la Universidad de Chile y Cortés finalizaría en 2016.

“Sentí esa presión de que me comparen con Aránguiz”, admite.

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- Tras su gran paso por Cobreloa fichó en Universidad de Chile. ¿Cómo se da su llegada al equipo laico?

- En ese momento yo trabajaba con Fernando Felicevich, pese a qué tenía mas contacto con Daniel Behar, una de las personas que trabaja con él. Me informó que había un par de ofertas concretas de Santiago y que la más factible era de Universidad de Chile.

- ¿Qué otros equipos ofertaron por usted?

- Junto a la U llegó un ofrecimiento de Colo Colo y, tiempo mas tarde, también se interesó Universidad Católica.

- ¿Qué lo motivó a escoger la oferta de la U?

- Yo tomé la decisión, más que nada, por dos razones. La primera, por el gran momento que vivía el club en esos años, donde era multicampeón. Y la otra tuvo que ver con mi cariño hacia Cobreloa. Soy reconocido simpatizante loíno y no podía tomar la decisión de fichar por Colo Colo que era el archirrival.

- En sus dos ciclos con el equipo azul no tuvo mucha continuidad. ¿A que siente que se debió ese poco protagonismo?

- Creo que tomé decisiones apresuradas y creo que si hubiera sido un poco mas cauto no me hubiera equivocado tanto. Me faltó madurez y eso me pasó la cuenta. Ya con la experiencia me di cuenta que me faltaron algunos años más de desarrollo en Cobreloa para después partir a un equipo importante como la U. Ahí la competencia es muy constante.

- ¿Fue la poca madurez un factor clave en su escasa participación con el cuadro azul?

- Creo que sí. Bueno, uno también llega a un mundo donde se te da todo muy fácil y estás inserto en una burbuja. Uno llega joven, con poca madurez. Me dejé llevar por muchas situaciones que a lo mejor debí haber manejado mejor y no me enfoqué totalmente en lo deportivo.

- ¿Qué mea culpa hace?

- Todo es responsabilidad mía. Debí haber estado mas atento con mi carrera dentro de la cancha. Aunque, también siento que no me dieron las oportunidades que necesitaba. Hay algunos jugadores que necesitamos regularidad, que somos débiles de cabeza y necesitamos consideración de parte del entrenador. Esa confianza no la sentí en Universidad de Chile.

- En el medio solían compararlo con Charles Aránguiz, ¿cómo se tomaba eso?

- Sí, me comparaban mucho. Con Charles fuimos compañeros en Cobreloa y un semestre en la U. Cuando se fue a Inter de Porto Alegre aumentaron las comparaciones, aunque yo siempre he sentido que cada jugador es diferente. Igual sentí la presión. Fue un desafío importante y no pude cumplir como esperaba. Fue una gran frustración.

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- Hoy, a sus 31 años, se encuentra sin club, ¿qué planifica para el futuro?

- Que sea lo que Dios quiera. Si llega alguna oferta, lo seguiré intentando. Si eso no pasa, veré otros rumbos en mi vida, en cuanto a lo familiar y como persona.

- O sea, ¿siente que el retiro es inminente?

- Si, yo creo que sí. Daré un paso al costado y me enfocaré en otros proyectos.