Fue goleador en Chile y ahora es hincha en el Mundial: “Los sudamericanos tenemos otra pasión”

Luciano Vázquez (37) llegó como un completo desconocido a Chile, pero acá se transformó en figura. A mediados de la década pasada, entre Ñublense y Huachipato, el “Tiburón” marcó casi 40 goles. Esas cifras le permitieron emigrar a Qatar, país en el que vivió largos años y donde también fue ídolo.

Hoy, Vásquez sigue jugando en el Ascenso trasandino, pero por estos días regresó a Doha para vivir de cerca la Copa del Mundo. Vázquez y su hermano son dos más de los de cientos de miles de argentinos que llegaron a Medio Oriente a ver a Lionel Messi y compañía.

“Estoy jugando en el Ascenso y renové un año más. Ahí veré qué camino elijo. También soy entrenador, pero por ahora sólo pienso en jugar, me siento bien. Ahora, de vacaciones, vinimos como hincha con mi hermano a alentar a Argentina”, cuenta el ex atacante de Ñublense en diálogo con AS Chile.

- ¿Cómo ha sido este retorno a Qatar?

- Qatar para mí es como mi segunda casa, viví mucho tiempo acá. Estoy adaptado y tengo muchos amigos. Hoy (jueves) estuve con Nicolás Córdova y con Felipe Núñez, con quien fuimos compañeros en Huachipato. Lo he pasado bien, estoy disfrutando.

- ¿Cómo ven el Mundial los argentinos? ¿Se ilusionan con el título?

- Nosotros siempre que tenemos un Mundial y con la calidad de jugadores que tenemos, nos ilusionamos. Pero es muy duro, hay equipos que tienen mucha jerarquía y pueden quedar fuera, como España con Marruecos. Ahora tenemos u rival durísimo como Países Bajos, además están Brasil, Francia e Inglaterra dando vueltas. Estamos ilusionados, pero esto es partido a partido.

- ¿Cómo está viviendo este rol de hincha? ¿Cuesta pasar a ese lado?

- (Risas) Cuesta muchísimo, porque acá uno ve varios partidos, no sólo los de Argentina. Intento analizar desde el lado del juego, pero después paso a ser hincha, obviamente. Los sudamericanos vivimos el fútbol de manera distinta, tenemos otra pasión.

- ¿Qué opina de Qatar como país? Mucho se habla de las restricciones, su cultura, etcétera...

- Yo llegué en el 2014, vi todo el proceso y los cambios antes del Mundial. La verdad es que todos teníamos incertidumbre con lo de las restricciones, pero creo que se han abierto un poco a todo. Obviamente hay que respetar sus horarios de rezo, su vestimenta y que nadie puede beber alcohol en la vía pública. De todas formas, he visto gente que llega, se compra una cerveza y se la toma ahí mismo. Eso antes era impensado, porque podías tener un problema muy grande.

- ¿No pensó quedarse a vivir en Qatar para siempre?

- Lo hemos hablado, pero yo soy muy de familia, estuve muchos años fuera de casa. Fue difícil eso, porque quieres aprovechar a los tuyos. Para mí, eso es lo más importante, se va pasando la vida y así nos perdemos muchas cosas.