Entrevista AS
Fue seleccionado español y hoy llega a Chile: “Mi nuevo club es conocido en todo el mundo”
Iker Hernández, delantero formado en la Real Sociedad, arribó a Santiago Wanderers. En el equipo vasco, por cierto, coincidió con Claudio Bravo: “Él nos ayudaba mucho”.
Iker Hernández (28), el refuerzo europeo por el que Santiago Wanderers apostó para mejorar en la segunda rueda del Ascenso, conversó con AS. El atacante español, quien es formado en la Real Sociedad y alguna vez defendió las series juveniles de la Selección hispana, abordó con optimismo su arribo al fútbol chileno.
“Estoy con mucha ilusión y ganas de ponerme rápido a tono, empezar a jugar partidos y aportar mi granito de arena”, afirmó el delantero, que en la última temporada militó en el UD Melilla, elenco de la Cuarta División de España, y marcó seis goles. En esta entrevista, Hernández también recordó sus días como seleccionado y le dedicó elogios a Claudio Bravo, a quien conoció en la Real Sociedad.
- ¿Qué referencias tenía del fútbol chileno y de Santiago Wanderers?
- Yo creo que Wanderers se conoce en todo el mundo, porque es un histórico. A pesar de que ahora esté en la segunda categoría, es un club grande. Y el fútbol chileno también lo conocía porque había coincidido con el profe Miguel (Ponce) en Bolivia.
- ¿Cómo se dio su fichaje en Wanderers?
- El profe Miguel me conocía (de San José de Oruro) y fue gracias a él. Estuvimos en contacto y el club emitió una propuesta. Y como yo estaba libre, porque acababa de terminar la liga en España, decidí venir.
- ¿Cómo fue su experiencia con Miguel Ponce en Bolivia?
- Buena. Al principio me costó un poco, pero luego me fui adaptando a la idea que tenía el profe y terminé jugando todo. Jugué bastante por banda, incluso de mediapunta, y se me hizo muy cómodo.
- Ya que Wanderers no está en un buen momento, y entendiendo que es futbolista europeo. ¿Siente que la gente puede esperar mucho más de usted?
- Siempre se espera mucho de los jugadores que llegan del extranjero a cualquier país. Si no, solo se contaría con futbolistas locales. Entonces, puede ser que sí. Yo tengo que devolver la confianza que el club me ha dado y darlo todo en los entrenamientos, ponerme rápido en forma y demostrar.
- ¿Qué mensaje le enviaría al fanático wanderino? Es muy apasionado, siempre apoya, pero también es muy exigente...
- Es normal que exijan en un club grande, sobre todo estando en la segunda categoría. Pero lo que vamos a prometer es la mejora que están viendo los compañeros, las ganas que tenemos de salir de esta situación, de ganar partidos, y todo empieza en el partido de este viernes (frente a Deportes Iquique, 20:30). Estamos con mucha ilusión, con muchas ganas de conseguir varios resultados positivos, e ir hacia arriba.
- ¿Está listo para jugar?
- Sí, ya estoy habilitado. Estoy poniéndome en forma y ahora decide el profe.
- ¿Cómo se definiría en la cancha?
- Soy un jugador trabajador, me gusta tener el balón, asociarme, pero también buscar la espalda de los defensas, la portería, dar asistencias a mis compañeros y meter goles. Soy un jugador de equipo y, a partir de eso, creceré.
- Usted es formado en la Real Sociedad. ¿Cómo fue ese proceso?
- Bonito. Estuve en un equipo importante, el de mi ciudad (Urnieta, Guipúzcoa). Es la ilusión de todo niño: eres hincha y estás con la ilusión de llegar a Primera División.
- De todos modos, le tocó jugar poco. ¿Quedó con una espina?
- Es muy difícil llegar. Yo conseguí debutar tanto en Copa del Rey como en La Liga en un partido... Tenía la ilusión de haber podido participar, pero sí se te queda una espinita por no haber jugado más. Pero bueno, estoy contento. El fútbol es difícil, complicado. Se tienen que dar muchas cosas y a mí se me dio esa situación, y feliz. Luego seguí luchando por más cosas.
- Con la Real Sociedad, eso sí, le tocó jugar un amistoso contra un Chelsea lleno de figuras en Stamford Bridge, en 2014. ¿Cómo fue esa experiencia?
- Muy bonita. Era una pretemporada, y jugar en semejante estadio... También habíamos jugado en el campo del Newcastle United. Entonces, enfrentar a esos monstruos en primera línea me generó ilusión y me dejó muy contento. Me dio más fuerza para seguir trabajando.
- ¿En la Real Sociedad alcanzó a conocer a Claudio Bravo?
- Sí. Coincidí con él en varias pretemporadas, partidos y entrenamientos. Nos ayudó mucho. Siempre charlábamos y nos daba consejos. Trataba muy bien a los jóvenes.
- ¿Qué les decía, por ejemplo?
- Él había vivido mucho en el fútbol y nos daba consejos de cómo posicionarnos y cómo patear el balón. Al final, él tenía un golpeo espectacular. Nos ayudaba en todo. También en cómo estábamos fuera del terreno de juego o si necesitábamos algo. Claudio estuvo muchos años allí y fue un futbolista importante. A los jugadores importantes o mayores siempre hay que escucharlos.
- Usted también fue seleccionado español en las series juveniles y marcó varios goles...
- Fue una etapa muy bonita. Llegar a la Selección es una recompensa porque estás haciendo bien las cosas. Entonces, te tiene que dar muchas más ganas para seguir trabajando y conseguir más tiempo allí. Jugué con grandes compañeros, contra grandes rivales, Eurocopas... Es una cosa muy importante para un jugador.
- Pudo compartir, por ejemplo, con Deuleofeu, Saúl, Raúl de Tomás, Bellerin y Adama Traoré. ¿Cómo los recuerda?
- No, pues gente normal (ríe)... Ahora los vemos muchos escalones por encima nuestro, pero era gente normal, con mucha ilusión, que trabajaba para poder llegar ahí. Eran buenas personas.
- Y si hablamos de rivales en ese contexto, algunos de ellos fueron Pickford, Sterling, Laporte, Rabiot, Martial, Bernardo Silva y Kovacic. ¿Es eso el gran tesoro de su carrera?
- Cuando juegas contra ellos sabes que son buenos, pero no te pones a pensar dónde llegará cada uno. Al final, el fútbol da muchas vueltas. Pero ahora, echando un poquito la mirada atrás, dices ‘joder, he jugado contra futbolistas muy buenos, que hoy están en el primer nivel’. Entonces, sí, puede ser que sí.
- ¿Se recrimina algo por no haber seguido en la Selección española?
- No. Yo tomé mi camino y estoy contento. Estoy contento. Siempre lo he dado todo y lo voy a seguir haciendo. Esto del fútbol es muy diferente para cada persona, para cada jugador. Lo único que queda es el trabajo.