Jugó 15 años en Chile, ganó un título de Primera y sonó en Colo Colo: “Hubiera sido hermoso”

Juan Pablo Miño está de vuelta en Chile y ya reapareció en San Felipe por el Campeonato Ascenso 2024. A fines de 2022, se había marchado tras finalizar contrato con Iquique, y después actuó en Douglas Haig en las categorías menores de Argentina. El mediocampista, de 36 años, conversó con AS sobre su sorpresivo retorno al fútbol local, pero también se dio un tiempo para analizar sus 15 años de trayectoria en Chile. Casi la totalidad de la carrera la ha realizado en el país.

“Chile ha sido muy importante para mí. Llegué el 2009, casi con 20 años y fui creciendo en el tema profesional y también en el tema humano. Formé mi familia y, gracias a Dios, estuve en equipos donde pude conseguir cosas. Siempre lo digo, estoy muy agradecido, porque gracias a lo que viví acá tengo un nombre. Siempre en los clubes que estuve traté de hacerlo de la mejor forma, obteniendo campeonatos y estando por ahí dos o tres años”, manifestó Miño.

- ¿Siente que le fue bien?

- Uno toma con respeto esto y en cada camiseta que me tocó defender lo hice siempre al máximo. Hay muchos hinchas que todavía lo recuerdan y eso es importante. Personalmente, es muy lindo sentirlo.

- Era joven, iba a cumplir 20 años cuando llegó. ¿Imaginó que iba a estar casi toda su vida acá?

- No, para nada. Llegué a San Luis y me trajo Diego Osella (ex DT argentino del club). Fue un año espectacular, porque salimos campeones, después ascendimos y fue un año redondo. Por ese lado, espectacular, pero por el otro uno extraña a su familia, los amigos, el barrio. Eso me costó un poco. Al final, uno va entendiendo que así es nuestra vida y que uno vive de esto.

- En todo este tiempo, ¿no sintió el impulso de hacer un giro y dejar Chile?

- La verdad es que cuando se pudo dar eso fue en el 2016. Creo que habían pasado seis meses desde que firmé en Audax y me llamaron de Talleres de Córdoba, que en ese momento estaba en el Nacional B (Segunda División de Argentina). Fue una propuesta directa conmigo, pero era muy difícil salir, porque recién había llegado a Audax. Tenía contrato por tres años y la opción era ir a préstamo.

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- ¿Cómo vivió los vaivenes de actuar en Primera División y también en el Ascenso?

- Al principio, cuando uno llega, sueña con jugar en Primera. El objetivo de todo jugador que está en el Ascenso es hacer las cosas bien, tener buenos partidos y llegar a un equipo de Primera. Me fui a Coquimbo, estuve casi cuatro años y salimos campeones, pero por un tema del formato del torneo no se ascendía directo. Anduvimos bien, pero no pudimos lograr ascender hasta que se me dio la posibilidad de ir a Cobresal.

- Un paso importante, salieron campeones en 2015…

- Sí, llegué al club a mediados de 2014 y pude jugar la Copa Sudamericana también. Debuté en Primera División, había un grupo muy bueno y todo fue muy lindo. La gente te recibe muy bien allá, hay mucha hospitalidad y tratan de hacerte sentirte muy bien. Fue una etapa hermosa, porque logramos el campeonato.

- Nadie lo esperaba…

- Sí, fue con mucho esfuerzo y con mucha entrega. Era un plantel sin la calidad de los jugadores de Colo Colo o de la U, pero el grupo estaba unido con tanta fortaleza que sabíamos que, en cada partido, uno dejaba la vida por el otro. Se nos fue dando hasta que llegó el momento y éramos campeones (ríe). Fue increíble.

- Fue una figura regular del fútbol chileno en estos años. ¿Tuvo chances de ir a un club grande?

- Sí, creo que fue por el 2015. Después de salir campeones con Cobresal, hubo algún rumor de una posibilidad de llegar a Colo Colo. Fue todo muy rápido, pero todo se descartó muy rápido. También salió lo de Audax, que fue concreto. El interés era ciento por ciento real y lo de Colo Colo parece que fue más un rumor. Hubiera sido hermoso y un sueño poder jugar ahí.