La baja en la U que podría acelerar un movimiento en el mercado

Hace cinco años que Universidad de Chile no vivía días tan felices. Desde 2018, que los azules no eran punteros del Campeonato Nacional (hoy comparten la cima con Cobresal y Huachipato) y, si bien recién comienza la segunda rueda, nadie le puede quitar la ilusión de soñar con el título al cuadro que en las últimas temporadas ha estado más cerca de dejar la categoría que de pelear arriba. Pero a pesar de este presente, hay algunas cosas que preocupan a Mauricio Pellegrino. ¿Una de ellas? La profundidad del plantel en algunas zonas.

El lateral izquierdo es la principal en este momento. ¿La razón? Luego de visitar a Unión Española, la U deberá enfrentar a Palestino, duelo en el que no contará con sus dos especialistas naturales: Marcelo Morales llegó a la quinta amarilla y José Castro se está recuperando de una lesión de rodilla. Por lo mismo, el movimiento esperado del DT azul debería ser improvisar con Yonathan Andía por ese sector... o salir al mercado.

Jovany Campusano, capitán de Ñublense, ha sido una de las alternativas que maneja la dirigencia para el puesto. De hecho, fue el propio jugador que reconoció un sondeo. “Sí hubo acercamientos a Universidad de Chile. Tengo contrato hasta fin de año con Ñublense. Mi objetivo es seguir creciendo en lo laboral”, fue la respuesta que hace menos de una semana dio el futbolista en charla con DSports. Su regularidad y personalidad llaman la atención en el CDA. Sin embargo, el problema de la U es que no cuenta con dinero para fichar.

“A nosotros el club nos expresó que es muy difícil firmar jugadores si no vendemos a Darío Osorio. Esa es la realidad de la institución. Si no entra dinero, es difícil que podamos firmar a un jugador de calidad”, comentó el pasado jueves Mauricio Pellegrino en conferencia de prensa. El tema es que el posible negocio que involucra al juvenil azul se ha enfriado. Se habló del Leicester inglés, pero el descenso de los ‘Foxes’ cambió el panorama. Hace unos días, West Ham se habría sumado al interés por el zurdo, pero sólo eso.

Antonio Díaz de O’Higgins e incluso Ronald de la Fuente de Curicó Unido también fueron vinculados al club, pero ninguno de esos casos avanzó. Y es que el momento de la temporada complica las cosas. Gran porcentaje de los jugadores están con contrato vigente, por lo que para tenerlos en la U, habría que negociar directo con los clubes, que no harían concesiones a la hora de conversar con Azul Azul. ¿Jugadores libres? Recién sería una opción a partir de diciembre.

La ecuación es simple. Si la U quiere reforzarse, deberá vender a uno de sus activos más prometedores. De lo contrario, Pellegrino tendrá que seguir echando mano a su actual plantel con el riesgo de utilizar a futbolistas en puestos diferentes a los que acostumbran utilizar. El desafío -y el riesgo- es grande.