La extraña tarde de Solari
El argentino nuevamente fue desequilibrante, pero falló en el finiquito. Al final, recibió el cariño de los hinchas y se tomó varias fotografías.
El segundo tiempo ante Alianza Lima estaba cerca de comenzar y miles de hinchas cantaban: “Olé, olé, Pibe Pibe”, se escuchaba fuerte en el Estadio Monumental, entre medio del partido de Colo Colo por Copa Libertadores. Era el cariño del público hacia Pablo Solari, quien vivió una jornada singular.
Solari nuevamente fue una de las figuras. Fue desequilibrante, rápido y encarador, como ya tiene acostumbrado al fútbol chileno. El argentino también presionó la salida rival y se complementó de gran manera con Óscar Opazo. En Alianza Lima sufrieron constantemente.
Sin embargo, el propio Solari falló en otro aspecto: el finiquito. El ex atacante de Talleres tuvo al menos seis oportunidades para marcar en el Monumental.
Si bien algunas jugadas fueron evitadas por Ángelo Campos, otras fueron desperdiciadas por el delantero de Colo Colo. Como en el primer tiempo, cuando estaba libre de marcas en el área chica y lanzó el balón al palo.
Pese a las deficiencias en la definición, Solari ya se ganó el respeto. Recibió el apoyo de sus compañeros y fue aplaudido por el público. Minutos más tarde, salió del camarín para saludar a tres cercanos y se aprovechó de tomar fotografías con unos fanáticos. Fue el cierre de una tarde rara para una de las figuras albas.