UNIVERSIDAD CATÓLICA
La UC muestra su peor cara
En su cuarto año seguido jugando la Copa Libertadores, la UC apenas ganó un partido de seis posibles, siendo una de sus peores versiones del siglo. Se compara con 2000 y 2003.
Un triunfo en seis partidos y cuatro puntos sobre 18 posibles. Ese fue el paupérrimo saldo de Universidad Católica en la Copa Libertadores. Para su fortuna, sumó dos unidades más que Sporting Cristal, lo que le permitió clasificar a los octavos de final de la Copa Sudamericana.
Los números son terribles. Tres de nueve puntos como local y solo uno como visitante hicieron imposible que Católica pudiera soñar con pasar de fase. Sin ir más lejos, quedó a siete unidades de Talleres, el segundo del Grupo H tras Flamengo (16).
La campaña 2022 hace recordar las temporadas coperas más oscuras de la UC en el siglo. En los años 2000 y 2003, Universidad Católica también había conseguido apenas cuatro puntos. La diferencia estuvo en que en ambas ediciones, fue colista (Boca, Peñarol y Blooming, y Paysandú, Cerro Porteño y Sporting Cristal, respectivamente).
El crudo retroceso cruzado
Desde que Católica juega de forma ininterrumpida desde 2019, esta fue por lejos su peor versión. Fue en la que menos puntos sacó y en la que menos ganó. En 2019 (7 puntos) y 2020 (7), la UC sumó dos triunfos y en 2021 (9) tres, registro que la clasificó a octavos, fase en la que fue eliminada por Palmeiras.
Hoy, ese piso que había trazado, se derrumbó. Llegó eliminada de Libertadores a la última fecha y el consuelo que le quedó fue clasificar a la Copa Sudamericana como el peor tercero de Libertadores.
En el segundo semestre, la escuadra que hoy dirige Ariel Holan buscará cambiar su imagen en el plano internacional.