U. de Chile - Lanús

Lanús amenaza a la U en Chile: estilo funcional, figura gravitante y cifras rotundas

El cuadro argentino llegó a semifinales con un andar firme a lo largo de la Sudamericana y será un rival de gran riesgo hoy en el Nacional. Así funcionan los granates.

Lanús amenaza a la U en Chile: estilo funcional, figura gravitante y cifras rotundas
Andre Coelho
Pablo Ortega
Periodista, Entrenador de Fútbol y ex futbolista profesional. Titulado en la Escuela de Periodismo de la Universidad de Chile y egresado del Instituto Nacional del Fútbol (INAF) de Santiago. Es columnista y redactor de Fútbol Nacional e Internacional y de temáticas de índole táctica en AS Chile.
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Este jueves, Universidad de Chile comienza a definir su destino en las semifinales de la Copa Sudamericana. Los azules enfrentan a Lanús, a partir de las 19:00 horas, en el Estadio Nacional, con la enorme oportunidad de volver a disputar el duelo por el título, al igual que en 2011, en caso de imponerse en la llave de ida y vuelta frente al elenco de Argentina.

El desafío reviste gran complejidad para los dirigidos por Gustavo Álvarez. El propio DT lo dejó en claro antes del duelo de hoy ante el plantel que comanda Mauricio Pellegrino, ex DT de la U. “Es un equipo organizado y práctico, sabe a lo que juega. Hay virtudes en todo el equipo que hacen que funcione“, explicó el estratega azul.

Los números favorecen a Lanús y son un gran aval. La última derrota ocurrió a inicios de septiembre en la Copa Argentina (1-0 contra Argentinos Juniors) y después registró 6 triunfos y sólo 2 empates en los 8 encuentros disputados. Los argentinos llegaron a semifinales tras vencer por 1-0 a Fluminense e igualar 1-1 en Brasil. Antes, habían eliminado a Central Córdoba por penales, liego de dos empates. En la fase inicial, ganaron el Grupo G frente a Vasco da Gama, Melgar de Perú y Puerto Cabello de Venezuela.

Así funciona Lanús

Los rivales de la U emplean el sistema de juego 1-4-2-3-1 con matices hacia un esquema 1-4-4-2 también como estructura base a lo largo de los partidos. Sin embargo, la primera organización posicional constituye el formato esencial y predominante que ha puesto en marcha Pellegrino a lo largo de toda su gestión en la banca del cuadro granate.

Se trata de un conjunto que posee como eje de funcionamiento el principio de juego Equilibrio. Por lo tanto, los granates actúan en el campo otorgándole igual relevancia a las Fases de Ataque y Defensa, con mayor razón en el ámbito internacional, instancia en que los partidos suelen resolverse por la mínima diferencia.

Es un equipo que defiende con un volumen importante de hombres y retrocesos veloces para no verse sorprendido. Se organiza primero con un Bloque Medio de Presión con el objetivo inicial de ralentizar las progresiones rivales o, si no, estabilizar el proceso defensivo y no correr riesgos cerca de la portería. La segunda opción es la conformación de un Bloque Bajo de Presión, espeso, cerrado y con movimientos coordinados para defender más atrás, pero aspirando con mayor seguridad.

Durante la etapa ofensiva, Lanús ocupa principalmente a los volantes externos y al mediocampista ofensivo para buscar el centrodelantero como agente principal de Finalización. Prioriza las acciones de Ataque Construido, con énfasis también en las asociaciones largas para llegar velozmente hacia al arco rival. Es una estructura de cuatro hombres en ataque, que suele contar con el apoyo como elemento extra del lateral izquierdo Sasha Marcich.

Figura clave

Lanús es un conjunto con un amplio sentido colectivo, pero una figura ha sido clave en lo bien que le ha ido en la Sudamericana y también a nivel local. Se trata del volante ofensivo Marcelino Moreno, mediocampista, de 30 años, quien inicia las evoluciones en la cancha posicionado detrás del centrodelantero (Walter Bou o Rodrigo Castillo), pero con amplia libertad para establecer y definir su ubicación a partir de cómo va el desarrollo del juego ofensivo.

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Moreno es un volante creativo con fortalezas en las habilitaciones hacia los integrantes del bloque ofensivo. Además, con un perfil de segundo ’9′ que torna más difícil el control defensivo rival. Establece conexiones hacia adelante reiteradamente, pero también avanza hacia el área penal oponente con desmarques de apoyo para la Finalización o mediante acciones de Dribling efectivas para rematar hacia la portería.

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