“Me dolió mucho lo que hizo Miguel Ramírez, hay códigos que respetar en el fútbol y él no lo hizo”

A sólo días de oficializar su salida de Unión Española, Franco Torgnascioli atiende el llamado de AS Chile. Desde Uruguay, su tierra natal, el portero de 34 años decidió hablar por primera vez tras firmar su finiquito con los hispanos y explicar los motivos de una decisión que ha causado bastante revuelo en el fútbol chileno.

“Estoy dolido, no la he pasado bien. Han sido jornadas tristes con un equipo que quiero mucho, donde me sentía identificado y me proyectaba por muchos años más. Mi esposa estaba trabajando en Santiago, estábamos tranquilos, entonces cuando uno tiene un futuro hecho, y de forma repentina se decide salir, choca bastante”, cuenta.

“Hace 10 años me fui de mi país y hoy tengo ganas de volver... Me costó mucho dejar Chile”

Respecto a los motivos que sentenciaron su salida de Santa Laura, el guardameta uruguayo es claro: “Me dolió lo que hizo Miguel Ramírez (actual DT de Unión Española). Me sentí poco respetado, no por la decisión de que me saque de la titularidad, sino por la manera en que actuó. Me molestó mucho porque hay códigos que respetar y él no lo hizo”.

- ¿Siente que el entrenador no manejó adecuadamente la situación?

- Me molestó la forma, no por el hecho de que me ponga como suplente porque eso es parte de las decisiones del entrenador, pero la manera en que lo hizo fue lo que me dolió. Me enteré en el táctico de que no iba a jugar y ni siquiera me lo dijeron antes. Soy un jugador que va a cumplir 35 años, los compañeros me quieren, me identifico con el club, los hinchas... Mínimo podían haberse acercado a hablar conmigo sobre la situación y listo.

- En declaraciones posteriores, el DT señaló que usted tenía intenciones de partir y puso en duda su compromiso con el equipo. ¿Qué le parecieron aquellas declaraciones?

- Con los años que tengo, eso fue lo que más me dolió porque hay códigos que respetarse. Cada quien se maneja como quiere, pero yo simplemente quedé dolido porque hay otras maneras. No guardo rencor, se dio como se tenía que dar, pero no me pareció bien. Entre las personas del fútbol, sea entrenadores o jugadores, nos tenemos que cuidar y él me expuso demasiado. Eso no se hace.

- Tras aquel lapsus, ¿volvió a hablar con Miguel Ramírez?

- Hubo una conversación donde hablamos y yo decidí dar un paso al costado porque creo que la relación con él no iba a ser buena. Hubo cosas que a mi no me parecieron y yo quería priorizar el bien del club. Imagínate que un jugador ‘grande’ se lleve mal con el DT, es la combinación perfecta para que las cosas no salgan bien. Preferí plantear mi salida y estuvieron de acuerdo todas las partes. Por ahí se me puede echar sólo a mí la responsabilidad, pero no, todas las partes estuvieron conformes. Fue pensado en hacerle un bien al club. Por más que me duela irme, doy un paso al costado, dejo mis intereses de lado, intereses personales, dejo un país, un club donde estaba contento, económicamente me afectó bastante... No todos los jugadores se comprometen de esta manera.

- Aparte del entrenador, varias voces pusieron en duda su compromiso con Unión Española. ¿Cómo tomó aquellas críticas? ¿Le parecieron injustas?

- Han salido muchas cosas que no son verdad y me han dolido. Se habló de que no tenía compromiso. Al contrario, soy muy comprometido. Le puedes preguntar a cualquier compañero o funcionario del club. He hecho hasta de gestor en Unión Española, para facilitarle la llegada a los jugadores extranjeros. He estado muy comprometido en todos los aspectos para que a Unión le vaya bien. Lo que más tranquilo me deja es el cariño de los compañeros respecto a eso. Estoy dolido porque yo me sentía importante en el club, me sentía un jugador que sumaba, que le hacía bien a los compañeros y que ellos me querían. La dirigencia también me demostró su afecto.

- ¿Su salida del club es únicamente por la situación con Miguel Ramírez o hubo otros factores?

- La salida es únicamente por eso. Vuelvo a reiterar, el conflicto no es porque me sacó de la titularidad, es por la manera, el destrato. Yo lo interpreto así. Se pudo haber hecho de otra manera. Lo que más me dolió fue como me expuso ante la opinión pública. No guardo rencor, no considero que sea una mala persona, es un entrenador que trabaja bien, un cuerpo técnico serio, pero en esa parte no estuvo bien.

- Respecto a sus ex compañeros. ¿Cómo tomaron la noticia? ¿Pudo despedirse del camarín?

- Sí, a los compañeros más grandes les fui comentando, para que entiendan de que yo quiero que a Unión le vaya bien. Todo lo que hice fue para tratar de perjudicar lo menos posible al equipo, para que no sufran de la decisión. Pablo Aránguiz, a quien considero un amigo y con quien hicimos una linda amistad, me dejó un mensaje hermoso cuando me despedí. He dejado grandes amigos en Unión, con los funcionarios también, eso me deja contento. Que te despidan con cariño, con lágrimas, ahí es cuando uno dice ‘dejé algo’. Con los hinchas también, es lógico que por ahí haya algunos que lo vean de otra manera, pero yo traté de hacer las cosas bien y priorizando al club antes que mis propios intereses.