“Mis padres son el motor de mi viaje; quiero devolverles todo y ayudar a mi comunidad”

Desde la cordillera, en la comunidad pehuenche de Bultalelbun, surge la figura de Manuel Vivanco. Él es un chico de 18 que, desde niño, tiene el sueño de convertirse en futbolista profesional. Gracias a una agencia pudo viajar a España en el 2024 y ahora repetirá la aventura para alcanzar su meta.

Sin embargo, como reveló en AS, él no podría perseguir este deseo sin contar con su familia. “La casa es la primera escuela que uno tiene, los papás. Gracias a Dios Somos una familia súper unida. Mi papá y mi mamá han sido mi motor en este viaje”, indicó.

- ¿Cómo ha sido el apoyo?

- Mis padres me apoyaron desde el minuto cero. Siempre me daban consejos de que podía ser el mejor en lo que yo quisiera o que todo se podía lograr. Siempre me mentalizaron en eso. No crecimos con muchas cosas, ni teniéndolo todo, pero ellos siempre han estado ahí. Mis hermanas igual me piden consejos y me dicen que soy un ejemplo para ellas.

- ¿Qué sacrificio han realizado sus padres para ayudarlo?

- Cuándo empecé en esta aventura, mi papá se dedicaba a la agricultura y ganadería. Entonces, un poco de las ganancias iban para mí y el resto para el mantenimiento que le da también a nuestra casa y a mis abuelos. La verdad, fue difícil, nunca me ocultaron nada y quizás eso me sirvió para conocer el sacrificio y el valor de las cosas. A medida que fui creciendo traté de ser más independiente.

- ¿Tuvo que trabajar durante su adolescencia?

- Durante la (Enseñanza) Media siempre salían unos trabajitos que podía hacer. En la comunidad me pedían cortar el pasto, también tenía gallinas y podía vender huevos. Además, hice trabajos de temporero, mis papás me firmaban el permiso y me iba a trabajar, me levantaba como a las 06:00 A.M. Entonces, de ahí pude ir generando un poquito para costearme lo mío.

- ¿Compaginaba estudios, trabajo y fútbol?

- Sí, por ejemplo, coordinaba bien algunos semestres donde tocaba libre porque tenía que complementarlos con los entrenamientos, los estudios y más trabajo. Entonces, siempre aprovechaba las vacaciones de invierno para hacer algún trabajo acá en el campo y en verano aprovechar las vacaciones.

- En caso de lograr su sueño, ¿cómo le gustaría recompensar a las personas que han estado siempre ahí?

- Bueno, si bien no es mucho por la parte económica, quiero devolverles todo lo que han hecho por mí. Me gustaría que a mi familia nunca les falte nada. Aparte, me gustaría ayudar a mi comunidad.

- ¿De que manera apoyaría a su comunidad?

- Quiero aportar en algo. Quizás seguir en este rumbo deportivo, para que no sea sólo yo el que logre ser futbolista en la zona. Por ejemplo, quiero tener escuelas de fútbol o filiales de ciertos clubes. Me gustaría a futuro que más chicos puedan motivarse y lograr sus sueños, independiente de si es el fútbol o no. Acá estamos en un lugar súper alejado y las oportunidades son pocas, así que yo quiero generar oportunidades para los más chicos. De esa forma se puede evitar que se pierdan las generaciones o que caigan en las drogas y el alcohol.