Entrevista AS
Pasó por Católica y la U, emigró a Italia con 18 años y hoy juega en el Ascenso: “Fue lindo, pero duró poco”
En conversación con AS, Mikel Arguinarena habló de su paso por Europa y los mejores años de su carrera: “Unión Española es el sueño que podría cumplirle a mi papá”.
Mikel Arguinarena (32) fue uno de los talentos más prometedores surgidos en el fútbol chileno. Se forjó en las inferiores de Universidad Católica y luego, con apenas 18 años, fue a probar suerte a la Reggina del Calcio italiano. Tras seis meses en Europa, regresó al país para incorporarse a las juveniles de Universidad de Chile, donde se encontró con el profesor Hugo Vilches, que, según cuenta, “fue uno de los técnicos que más me marcó en mi carrera”.
El volante tuvo la posibilidad de formar parte del primer equipo con los azules, pero no se consolidó. El 2013 partió a Barnechea en busca de más oportunidades. “Por lejos, siento que mi mejor año fue cuando subimos a Primera”, recuerda. Posteriormente, tuvo pasos por Everton, Huachipato, Curicó y Magallanes, pero no encontró regularidad. El año pasado recaló en San Marcos de Arica, club con el cual sueña repetir la hazaña del ascenso.
“Ha estado fuerte la temporada en Arica. Queremos empezar de la mejor forma para poder mantenernos arriba en la tabla. El objetivo es subir de categoría. Primeros, segundos o en la liguilla, tenemos equipo para pelearla. Tenemos que pelearla para cumplirle el sueño a la familia, los hinchas y todos nosotros. Compañeros, cuerpo técnico y el club”, se entusiasma.
Su paso por Europa
- ¿Cómo fue su estadía por Europa?
- Fui a la Reggina, estuve ahí medio año. Me topé con un fútbol mucho más físico, distinto al que estaba acostumbrado en ese momento. Eso fue hace 15 años atrás más o menos. Ahora acá en Chile ha evolucionado harto el fútbol en ese sentido. Fue una linda experiencia estar allá. Difícil, pero linda.
- ¿Qué aprendizaje le dejó su paso por el Viejo Continente?
- El paso por Europa me llevó a que tenía que prepararme mucho mejor. Era un fútbol mucho más físico. Después con el tiempo uno va adquiriendo lo que faltaba por momentos. Fue lindo pero duró poco. Sin embargo, no me arrepiento por nada del mundo.
El regreso a Chile
- ¿Por qué volvió a Chile?
- Volví a Chile porque volví a la U. Justo estaba el ‘profe’ Hugo Vilches, que es uno de los técnicos que más me ha marcado en mi carrera. Él estaba ahí, volví a la juvenil de la U y pude estar en el primer equipo. Después fui a los clubes que he recorrido hasta ahora.
- ¿Qué balance hace de su carrera?
- Mi carrera ha ido de menos a más. Siento que me faltó madurar un poco en el sentido de prepararme mucho mejor, como lo estoy haciendo hoy en día. De eso de trata también. Con la experiencia que tengo ahora debo tratar de que mi carrera vaya en alza aun más. Para eso me estoy preparando todos los días. Me siento mucho mejor que antes.
- ¿Cuáles han sido sus mejores años?
- Mi mejor año creo que fue el primero en Barnechea, cuando logramos subir de categoría. Después fui un poco irregular porque no agarraba mucha continuidad en algunos equipos. Todos los años son distintos, pero todos te dejan algo. Mas lejos siento que mi mejor año fue cuando subimos a Primera con Barnechea. Este año en Arica también fue bueno pero puedo dar mucho más.
“Unión Española es el sueño que podría cumplirle a mi papá”
- ¿Qué le motivó a partir a San Marcos?
- Me costó tomar la propuesta porque sentía que era lejos. Uno siempre tiene el miedo de eso pero me encontré con algo distinto. El club nos da todas las comodidades. Es extraordinario en ese sentido. Uno no tiene de qué quejarse. Me sorprendió para bien la ciudad y todo me han recibido con mucho cariño.
- ¿Qué es lo que más extraña de Santiago?
- Lo que más extraño de Santiago es mi familia. Siempre se extrañan los hermanos, los papás, las juntas familiares, los domingos. Eso es lo que más extraño. La familia que siempre que ha estado con uno.
- ¿Le gustaría volver a jugar en un club de la ciudad? ¿Cuál?
- En Santiago hay más vitrina. Están los clubes más grandes. Así que en ese sentido claro que me gustaría jugar allá en algún momento. Sería en Unión Española, que es el sueño que le podría cumplir a mi papá. Mi abuelo es español y mi papá también tiene la nacionalidad. Por eso siempre fuimos cercanos al club. En lo personal es un equipo que también le tengo cariño porque me trae recuerdos de cuando íbamos al Santa Laura a ver al Coto Sierra y Heidi González que la rompían.