Pasó por Chile y alguna vez dejó a Messi en la banca: “Casi nos peleamos”
Fueron campeones en la Copa del Mundo Sub 20 que se jugó en Holanda en el 2005 y tuvo el ‘honor’ de dejar en el banquillo al astro argentino.
En el Mundial Sub 20 del 2005, Lionel Messi ya jugaba en el Barcelona, pero en el debut ante Estados Unidos el DT Francisco Ferraro sorprendió a todos. La ‘Pulga’ apareció en la banca y en su lugar dentro de la cancha estuvo Gustavo Oberman, prometedor futbolista -en aquel entonces- de Argentinos Juniors.
La selección norteamericana dio el golpe y venció 1-0 a la Albiceleste, que contó todo el segundo tiempo con Messi. Tras eso, el equipo donde también estaban Julio Barroso y Sergio Aguero venció a Egipto y Alemania para pasar a la ronda final, donde eliminó a Colombia, España y Brasil. En la final vencieron a Nigeria, Argentina se coronó campeón y Oberman, el que dejó en la banca a Lio, recuerda junto a AS la obtención de esa Copa del Mundo.
- Es de los pocos que puede decir que dejó en la banca a Lionel Messi...
- Sí, fue un momento que tiene su explicación. Messi venía de una temporada en la que había tenido algunos problemas físicos y el técnico no lo quería arriesgar. Me tocó jugar a mí. Después de ese partido, pudimos jugar juntos los seis partido restantes y eso es lo que recuerdo con más cariño.
- Además, fueron campeones.
- Sí, lo recuerdo con alegría, con orgullo, porque para mi o para cualquier chico, representar a tu país es de las cosas más lindas que te pueden pasar. Mejor aún si lo coronas con algún campeonato. Y después ver que esos compañeros con los que compartiste fueron haciendo carreras maravillosas, te llena de orgullo, tanto la de Messi como la del ‘Kun’, Ezequiel Garay, Fernando Gago, Lucas Biglia... todos hicieron carreras muy buenas.
- ¿Qué le faltó para tener una carrera como la de ellos?
- Eso es algo que muchas veces me pregunté. La realidad es que yo sentía que estaba al nivel de seguir por ese camino. No sé si el de Messi, pero siempre me sentí capaz. A veces situaciones del fútbol te van golpeando, uno es joven y no llegas a asimilar bien lo que pasa y eso te va quitando la ilusión y las ganas. Después de mi paso por River, las formas en las que me tuve que ir...
- ¿Cómo se fue?
- Me decían que me vaya porque, sino, no iba a jugar nunca más al fútbol y me iban a tener entrenando solo los tres años de contrato que me quedaban. Era muy joven y ese golpe no lo asimilé bien. Volví a Argentinos Juniors, enojado con el fútbol y después, cuando me salió la oportunidad de irme, me fui a España, pero competir ya no era tan fuerte en mí como antes y eso es fundamental para un jugador. Siempre me encantó jugar, pero el fuego que te empuja ser mejor con los golpes a veces los vas perdiendo.
- ¿Algún recuerdo con Messi en aquella época?
- No es una anécdota graciosa, pero sí una vez que se enojó mucho. Le hicieron una broma, en un ascensor y casi nos peleamos porque creyó que había sido yo. Fue la típica broma cuando uno de está de espalda y le golpean en la nuca. Le dijeron que había sido yo, que de verdad no había sido. Se enojó harto y casi nos peleamos, nos tuvieron que separar.
- Imagino que, en general, se llevaban bien.
- La convivencia, en el día a día con él, era muy tranquilo y de estar en sus cosas. Era un chico muy reservado, muy educado y creo que fue algo que demostró durante toda su carrera.
- ¿Siguieron en contacto?
- No, no, no. Siempre pongo el contexto de que en ese momento no existían todas las redes sociales que existen ahora, como los grupos de WhatsApp, Instagram o Facebook, donde te queda el contacto para siempre. Eso no existía. Con muchos de los compañeros pasó que perdimos el contacto, pero son las cosas que pasan.
- ¿Cómo ve la final del domingo?
- Como hincha argentino estoy ilusionado. Se ve un equipo comprometido, con unión, con ganas y buen fútbol. Eso hace que todos nos ilusionemos. Francia es un gran equipo, con muchas individualidades y va a ser un partido muy difícil. Va a ser parejo y creo que se nos puede dar.