“Salvarnos del descenso con la U fue una sensación inexplicable... Fue casi como ser campeón”

El 5 de diciembre de 2021, Universidad de Chile vivió su partido más trascendental de los últimos años. No se trató de una final por algún título, como acostumbró el cuadro azul en algún momento, sino de un duelo que estuvo cerca de provocar su descenso de categoría. Al final, el elenco universitario se salvó tras remontar un épico partido ante Unión La Calera. Diego Carrasco (27) fue uno de los protagonistas pese a que sólo jugó un minuto.

“Fue complicado pelear abajo ese año. Sabiendo que es un equipo grande, fue terrible. Nos complicó la cabeza. Pero siempre tuvimos fe en que la situación mejoraría y nos íbamos a quedar en Primera y así se dio”, declara el hoy defensor de Coquimbo Unido, en diálogo con AS.

El zaguero arribó en 2019 al CDA, bajo la dirección técnica de Frank Kudelka, y luego de haber sido capitán y campeón de la Primera B junto al conjunto ‘Pirata’. “Fue un paso muy grande para mí. Salir campeón acá con Coquimbo e ir a la U, uno de los equipos más grandes de Chile, que siempre pelea cosas, fue bonito”.

- ¿Cómo evalúa su paso por la U?

- Lo veo siempre desde el lado positivo. Los tres años que estuve ahí, a pesar que tuvimos malos momentos en lo futbolísticos, aprendí muchísimo. Me llevé mucha gente linda del club, aprendí mucho con técnicos, con funcionarios y con compañeros. Me llevó lo mejor de mi paso por la U.

- ¿De qué técnico aprendió?

- Creo que, principalmente, de Hernán Caputto. De él aprendí mucho. Y tuve compañeros de jerarquía, como Osvaldo González, Matías Rodríguez o Jean Beausejour, jugadores que pasaron por un montón de países… Walter Montillo igual. Y lo más importante es que todos fueron muy buena gente conmigo.

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- Los hinchas de la U se acuerdan de su arenga desde la banca en el duelo ante Unión La Calera. Usted fue protagonista desde ahí y las cámaras lo enfocaban constantemente motivando al plantel, sobre todo tras el 2-0 del cuadro ‘cementero’. ¿Cómo recuerda eso?

- Jajajá, lo recuerdo muy bien. Al final a nadie le gusta perder y nos estábamos jugando algo muy importante. Estábamos a punto de descender y me salió del alma, fue una sensación de motivar, de que no podíamos perder, que teníamos que ser competitivos hasta el final, y como yo estaba en la banca, porque entré al último minuto para hacer tiempo nomás (ríe), lo viví con toda la pasión que pude.

- ¿Qué sintió cuando terminó el partido y la U se salvó?

- Creo que fue una sensación inexplicable, el no descender lo celebramos casi como salir campeones (ríe), que no era lo que estaba pasando, pero se sentía así. Fue algo muy lindo, una emoción muy grande. Y una vez que terminó el partido, festejar con tus compañeros, abrazarse… saber que lo lograste.

- ¿Le gustaría volver a la U?

- Sí, creo que sí, ojalá se pueda dar en algún momento. Más maduro. Siento que aún era chico cuando llegué a la U. Hoy me siento feliz en Coquimbo Unido y sólo estoy pensando en que nos metamos a una copa internacional.