Entrevista AS
“Serás el mejor ‘10′ de Chile”: el sueño truncado de una figura que pasó por la UC y la U
Debutó en la U de Jorge Sampaoli el año 2011, fue goleador en divisiones inferiores y seleccionado chileno. Nicolás Palma, hoy nos cuenta su historia.
Nicolás Palma (28) pintaba para ser uno de los jugadores más destacados del fútbol chileno. Fue goleador en divisiones inferiores con las camisetas de Universidad Católica y Universidad de Chile, debutó con Jorge Sampaoli en un partido amistoso de los azules y vistió la camiseta de la Selección Chilena en un Sudamericano Sub 17. Hoy está sin club y aún esperando por una nueva oportunidad.
“En la UC tuve como compañeros de equipo a Guillermo Maripán, Guillermo Soto y Nicolás Castillo; en la U a Igor Lichnovsky y Angelo Henríquez”, recuerda.
“En mi carrera tuve momentos muy malos, años pasándolo mal. No estuve al ciento por ciento conmigo por mucho tiempo. Hubo decisiones tanto externas como propias, que me afectaron”, reflexiona el jugador que también pasó por Unión Casablanca, Trasandino, Santiago Morning, FC Angostura de Venezuela y Barra FC de Porto Alegre.
- ¿Cómo fue su paso en la UC y cómo lo valora?
- Católica me formó como persona y futbolista, siempre lo voy a agradecer. Tuve profesores que siempre me ayudaron, como Andrés Romero, Rodrigo Astudillo, Mario Lepe y Hugo Monardes. Fui muy feliz en la UC, pasé cosas muy lindas. En lo deportivo fui goleador en todas las categorías de la Sub 12 hasta la Sub 15.
- ¿Por qué se fue de Católica?
- En la Sub 15 yo jugaba de ‘10′ y el entrenador de la categoría le decía a mi papá y a mí que quería formar al mejor diez de Chile. Sin embargo, me hacía jugar solo como ‘9′. Yo me sentía muy incómodo en esa posición. Hablaba con él y me decía, tranquilo, yo quiero que tu seas el mejor ‘10′ de Chile, pero por ahora vas a jugar en esa posición. Después con otro entrenador a cargo, partí súper bien, pero de un momento a otro dejó de citarme. Católica siempre me dio todo y que de un momento a otro se me dejara afuera, fue muy duro. Por eso, terminando el campeonato hablé con “Tuto” Astudillo y le dije que quería irme. Él me insistió que no me fuera, que en otros equipos no es como en Católica, ya que en el club trataban al jugador como persona. Me lo repitió bastante, pero yo me cegué y le dije que me quería ir y así fue.
- ¿Después va a la U, cómo se da su paso a la Universidad de Chile?
- Cuando tenía decidido salir de la UC, me acerqué a la U, que de inmediato tuvo interés en mí.
- ¿Cómo fue su período en los azules?
- Me adapté muy rápido. Mi primer año fue muy bueno, ya que fui goleador en la categoría Sub 16, pero mi segundo año fue maravilloso. A comienzos del 2011 fui nominado a la Selección Chilena para jugar el Sudamericano Sub-17 de Ecuador y esa fue una experiencia espectacular, me gustó mucho. Luego fui sparring de Jorge Sampaoli en la U, me tocó entrenar con ese gran plantel campeón de la Copa Sudamericana, y lo máximo pasó en octubre de ese año: Sampaoli me hizo debutar en un partido amistoso contra Alianza Lima. Ganamos 2-0 y yo ingresé en el segundo tiempo.
- ¿Cómo recuerda ese momento?
- Sampaoli me llamó para entrar a la cancha y en ese momento me vino un ‘cagazo’ jajajá... pero ya estando en el campo de juego se me olvidó todo, traté de dar lo mejor de mí y realicé un partido correcto. Fue un partido inolvidable que siempre tendré en mi corazón.
- ¿Qué es lo que más rescata de estar bajo la dirección técnica de un entrenador tan exitoso como Jorge Sampaoli?
- Que siempre nos daba charlas espectaculares, nunca me voy a olvidar de eso, de las frases que decía: ‘El partido termina cuando suena el silbato final’, ‘da lo mismo el resultado, lo importante es la actitud con la que se enfrentan los partidos’, y “las ganas de estar con los compañeros en momentos difíciles”.
- ¿Qué recuerda de su año entrenando con esa U que ganó la Sudamericana?
- Era espectacular, pensaba todo el día en los entrenamientos, era muy motivante, estar junto a jugadores como Charles Aránguiz, Marcelo Díaz, Matías Rodríguez, Johnny Herrera o Eduardo Vargas. Gustavo Lorenzetti hasta me dio zapatos alguna vez. También lo consideraba un crack.
- ¿Por qué partió de la U?
- En la categoría juvenil es cuando comenzaron mis problemas con el club. Yo igual hago el mea culpa, porque me porté mal en muchas situaciones, pero siento que el trato hacia mí fue como me había advertido el “Tuto” Astudillo en la UC.
- ¿Qué ocurrió específicamente?
- En un partido por Copa Chile el 2012 contra Santiago Wanderers, Sampaoli me nominó con otros canteranos. Cuando supe fue una felicidad máxima, yo estaba algo lesionado, pero se me olvidó todo con esa gran noticia. Sin embargo, cuando estaba todo prácticamente listo y ya le había comentado a mis padres, un día antes del partido me va a buscar el entrenador de la juvenil al camarín, me dice que me necesitaban. La verdad, yo no quería, pero de igual manera me bajaron de la citación. Después, para el partido juvenil, el profesor me dijo ‘Nico, vas de titular y capitán’, pero yo no quería jugar, lo hice porque mi papá que me obligó. Estaba enojado y triste. Después de eso cuando sucedieron cosas que hasta el día de hoy no me explico. Una semana antes que me avisaran que me iba del club, me habían dicho que estaba listo para el próximo año. ¡Yo pregunté que pasó y no me dijeron nada!
- ¿Y qué sucedió después?
- No quería seguir jugando al fútbol. Estuve en Barnechea, pero duré como semana y media, me iba de los entrenamientos. A mi representante le decía que me daba lo mismo en qué equipo jugar. Entrené en Santiago Morning, después pasé dos meses en Unión Casablanca y luego en Trasandino. En estos últimos me reencontré con el fútbol.
- ¿Cree que si hubiese seguido en la UC, su carrera sería distinta?
- Sí, sería completamente diferente. Es un equipo que sabe tratar a las personas. Desde que entré al club hasta que me fui, me trataron como tal, con la mayor disposición de conversar los problemas. Siempre me apoyaron en todo. Solo vi algo parecido en los primeros dos años que estuve en la U y en los clubes extranjeros en los que jugué.